Jorge Arturo Jiménez Hurtado, fue víctima de la discriminación y “vergüenza” que le hicieron pasar en el Bancomer donde acudió a cobrar su incapacidad, no iba con pasamontañas, no traía armas, y cuando llegó al banco a la una de la tarde de ayer acompañado de su esposa.
Jorge Arturo está convaleciente por una operación que le realizaron por lo que debe protegerse con cubrebocas por lo que lo enviaron a la calle a firmar su documento.
Delante en la fila estaba otro señor elegante llamando por celular, frente a una caja, donde no le impidieron hablar por teléfono, ni lo retiraron, pero en cuanto a Jorge Arturo le sonó el celular, salió a contestar cerca de los cajeros, llegó Seguridad Ciudadana y lo tomó del brazo, cinco elementos llegaron (3 en bicicleta, uno en moto y otro en carro), “yo no podía estar dentro del banco por razones de seguridad”.
Les explicó que hace unos días lo operaron, le retiraron el bazo, que tiene las funciones de proveerle de anticuerpos, significa, que de exponerse a cambios en el ambiente corre riesgos de recaídas fuertes, razón por la que debe tener tapabocas en tanto no se le aplique en unas semanas la vacuna del neumococo, que no ha podido recibir.
Mostró la operación en su abdomen, y ratificó que es él quien debe de firmar para cobrar su incapacidad, pero aun así lo dejaron a fuera. Luego cuando su esposa llegó a la caja, no querían hacerle efectivo el pago porque él no estaba, luego de ponerse a ver cómo se le podía hacer mandaron a alguien a firmar un documento, pero faltaba otro. Pedían que Jorge Arturo se quitara el tapabocas, y la esposa les dijo si se hacía responsable el banco pues se lo quitaba, pero no quisieron.

Por Redacción AM

Escrito en Celaya el 14/4/2015 · 00:00