La primera edición de la Recolección de Medicamentos Caducos logró rebasar la meta gracias a la participación de la ciudadanía acambarense.
Luis Serrano, coordinador estatal de Sistema Nacional de Gestión de Residuos y Envases de Medicamentos (Singrem), aseguró que la respuesta de la población local fue bastante buena, pues desde muy temprano los habitantes de esta ciudad acudieron a depositar sus medicamentos que ya estaban fuera de la fecha de consumo.
El funcionario mencionó que durante la recolección se recibieron todo tipo de medicamentos, desde aspirinas hasta medicamentos de alta especialidad; la meta era tener 200 kilogramos reciclados.
Asimismo, comentó que los medicamentos reciclados se llevarán a un contenedor para luego ser destruidos en los hornos de tipo sementero, donde cada mes normalmente son incinerados.
Dicha labor la realiza el Singrem, organismo certificado por las autoridades para pulverizar los medicamentos.
Luis Serrano añadió que la intención del evento es retirar del mercado ilícito los medicamentos caducados y evitar riesgos en la salud de la población por ingesta accidental o provocada.
Además, evitar la contaminación ambiental, pues si el medicamento cae al subsuelo los mantos friáticos se contaminan, lo que se considera como un problema de salud grave.
Por último, el coordinador del Singrem dijo que quien no haya alcanzado a llevar su medicamento, puede acudir a las farmacias ISSEG o al Hospital General de esta ciudad, ahí se colocaran contenedores permanentes para el depósito de las medicinas caducas.

Exponen piezas de ferrocarril

Con cerca de mil 500 piezas, el museo José Cardoso Téllez mantiene sus puertas abiertas para que los vacacionistas visiten y conozcan la historia del ferrocarril.
Daniel Reynaert Lepére, director del museo, dio a conocer que la exhibición muestra parte de la historia que vivió el municipio, cuando el ferrocarril se encontraba en sus mejores tiempos.
Además se muestran fotografías de máquinas de vapor hasta imágenes de máquinas actuales, como las eléctricas y diesel.
Otras de las piezas son las boleteras, cambios de vías, un reloj checador de principios del siglo pasado, y silbatos de vapor utilizados para entrada y salida de los trabajadores del ferrocarril.
También se aprecian piezas antiguas de oficina como máquinas de escribir, teléfonos sin disco de marcación, y prensas que servían como copiadoras.
En caso de que deseen acudir al museo en grupo, informó que se pueden comunicar al 417 172 5328. Las puertas están abiertas de martes a domingo de 9 de la mañana a 2 de la tarde y de 4 a 6 de la tarde; el acceso es gratuito.