El intento de 12 elementos de Fuerza Civil --la Policía de Nuevo León-- por detener una camioneta derivó ayer en una emboscada.
Hasta anoche, el saldo de los hechos registrados en el Municipio de Vallecillo, era de un agente muerto y dos heridos, así como cuatro elementos cuyo paradero se desconocía.
De los cuatro policías no ubicados, informaron fuentes, tres están en calidad de desaparecidos y una mujer estaría en manos del grupo criminal agresor.
En total, en la jornada seis oficiales habrían sido levantados por sicarios, pero cinco fueron puestos en libertad.
De acuerdo a las fuentes, los hechos iniciaron a las 16:00 horas en una brecha que comunica los municipios de Parás, en Nuevo León, y Nueva Ciudad Guerrero, en Tamaulipas.
Ahí, los 12 oficiales en dos patrullas detectaron una camioneta roja sospechosa, lo cual desató una persecución y una balacera en un punto de la Carretera Vallecillo-Parás conocido como “Brecha San Carlos”.
En ese sitio, un uniformado murió y otro resultó herido de gravedad.
Sus compañeros continuaron la persecución a los agresores, quienes se habrían internado en una brecha que conecta con Nueva Ciudad Guerrero.
En ese punto, fueron emboscaron los policías con saldo de un agente herido, seis plagiados y tres desaparecidos.
Al llevarse la patrulla número 341 con los oficiales, los sicarios se habrían comunicado por la frecuencia policiaca para advertirle a los refuerzos que no los siguieran o iban a asesinar a los policías.

Por Reforma

Escrito en Celaya el 4/5/2015 · 00:00