Hombres palestinos efectuaron el sábado dos ataques con arma blanca en Jerusalén antes de ser abatidos por la policía, mientras que otros dos fueron muertos durante una manifestación cerca de la valla fronteriza de Gaza en una semana de violencia que no da indicios de ceder.
Jerusalén ha visto una ola de ataques a puñaladas ligados a las tensiones en el Monte del Templo o Explanada de las Mezquitas, un sitio de la Ciudad Vieja que es sagrado para judíos y musulmanes. En días recientes los ataques de los agresores palestinos se han extendido al resto de Israel, mientras que protestas violentas han estallado en Cisjordania y a lo largo de la frontera de Gaza, donde siete palestinos fueron asesinados el viernes. La violencia ha inquietado a un Israel de por sí nervioso e impulsó a Estados Unidos a expedir el sábado un nuevo llamado a la moderación para ambos bandos.
En el primer apuñalamiento del sábado, un palestino de 16 años atacó a dos israelíes que caminaban desde la Ciudad Vieja hacia el centro de la ciudad, informó Micky Rosenfeld, el portavoz de la policía. Los agentes abrieron fuego y dieron muerte al agresor. Las dos víctimas fueron heridas levemente, agregó.
Más tarde, justo afuera de la Ciudad Vieja, otro palestino apuñaló a dos policías, uno de ellos en el cuello. Rosenfeld afirmó que otros efectivos policiacos dispararon y mataron al atacante, pero también hirieron a uno de los suyos. Tres oficiales fueron llevados al hospital, uno de ellos en estado grave.
Mientras tanto, en la frontera de Gaza las protestas se reanudaron el sábado por la tarde, con decenas de palestinos que lanzaban piedras y neumáticos en llamas a las tropas israelíes a lo largo de la valla fronteriza. Funcionarios de salud de Gaza mencionaron que las fuerzas de Israel mataron a tiros a un niño de 13 años y otro de 11. El ejército israelí dijo que disparó contra los manifestantes que se acercaron a la frontera.
Más tarde, el ejército señaló que decenas de palestinos cruzaron la frontera y entraron brevemente a Israel. Agregó que cinco fueron detenidos para ser interrogados, mientras que los otros se replegaron.
La frontera de Gaza ha estado en calma en gran medida desde la guerra de mediados del año pasado entre Israel y el grupo extremista islámico Hamas, que gobierna el territorio costero. Un cohete fue disparado el sábado por la noche hacia Israel, pero fue interceptado por el sistema de defensa israelí Domo de Acero, informó el ejército. Fue el segundo ataque con cohetes en las últimas 24 horas. No se reportaron lesiones ni daños.
Rosenfeld dijo que en un vecindario árabe del este de Jerusalén la policía también estuvo bajo ataques durante toda la noche y respondió con disparos, los cuales alcanzaron a un hombre de 25 años. Funcionarios de salud confirmaron más tarde que el individuo murió a causa de sus heridas.
Protestas violentas estallaron tras el funeral del hombre en cuestión, con rocas y bombas incendiarias lanzadas hacia la policía, que abrió fuego e hirió ligeramente a dos personas.
En la ciudad de Ramalá, en Cisjordania, manifestantes lanzaron rocas a las tropas israelíes, que respondieron con gases lacrimógenos.
El sábado por la tarde, el Departamento de Estado norteamericano dijo que el secretario de Estado John Kerry les llamó al líder israelí y al palestino para expresar su preocupación en torno al brote de violencia en los sitios sagrados de Jerusalén.
En llamadas por separado con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y el presidente palestino Mahmud Abás, el funcionario norteamericano les dijo que Estados Unidos está atento al creciente derramamiento de sangre. Kerry hizo énfasis en la importancia de evitar la retórica provocativa y dijo que Washington prestará su apoyo donde pueda para restaurar la calma.