Si Rafael Nadal requería que algo le recordara cuánto tiempo ha pasado desde que ganó el Abierto de Australia solo necesitaba mirar el “09” que decora su tenis izquierdo.
Tras pasar la mayoría de los últimos seis meses inactivo debido a las lesiones y tras caer en la primera ronda de un torneo de preparación el ganador de 14 torneos de Grand Slam dijo que no se sentía muy confiado al entrar al primer major del año.
El español le puso remedio a eso con un triunfo contundente de 6-3, 6-2, 6-2 sobre el veterano ruso Mijaíl Youzhny en el primer día del Abierto de Australia, que ganó en 2009 y en el que llegó a la final en 2012 y 2014. Nadal colocó 37 winners y cerró el tercer set haciendo su clásico gesto con los puños.
El segundo cabeza de serie del torneo, el suizo Roger Federer, quien ganó la última de sus cuatro coronas australianas en 2010, tuvo un buen entrenamiento en su primera noche de partido en la pista Rod Laver antes de eliminar al taiwanés Lu Yen-hsun por 6-4, 6-2, 7-5.
Andy Murray, que acumula tres finales en Australia, empezó una nueva andadura para lograr el título imponiéndose por 6-3, 6-4, 7-6 (3) al indio Yuki Bhambri, que se clasificó en rondas previas.
La primera gran decepción del torneo la protagonizó la quinta preclasificada, Ana Ivanovic, quien cayó 1-6, 6-3, 6-2 ante la checa Lucie Hradecka, que llegó allí sorteando las rondas previas.