Crónica de una catástrofe anunciada: La sequía en Guanajuato está matando al campo
El Secretario de Desarrollo Agropecuario y Rural alerta sobre la grave situación de sequía en Guanajuato, con la mayoría de las presas casi secas y cultivos en riesgo. Son necesarias y urgentes las lluvias para evitar una catástrofe
Guanajuato.- Si la sequía en Guanajuato no termina en los próximos meses, habrá una catástrofe en el campo, aseguró el secretario de Desarrollo Agropecuario y Rural, Paulo Bañuelos Rosales. Mencionó que las presas de Guanajuato están casi secas, y la presa Solís en Acámbaro solo tiene capacidad para dos riegos para el distrito 011, el más importante para la producción de alimentos.
El Monitor de Sequía del Sistema Nacional Meteorológico muestra que, desde el 15 de diciembre de 2021, se identificaron los primeros municipios guanajuatenses anormalmente secos: San Luis de la Paz y Victoria. Al 15 de enero de 2022, se sumaron San Felipe, Jerécuaro y Coroneo.
A partir de ahí, más municipios se integraron como anormalmente secos, una etapa que puede limitar el crecimiento de cultivos y pasto, y aumentar los riesgos de incendio. En febrero de 2022 comenzó la sequía moderada en seis municipios, y en julio de 2022 todo Guanajuato estaba en sequía moderada o severa.
La sequía moderada causa daños en cultivos y bajos niveles en ríos, arroyos, embalses y pozos. La sequía severa aumenta los riesgos de incendios y la escasez de agua, sugiriendo restringir su uso.
La condición de sequía se intensificó en abril de 2023, con la mayor parte del estado en categoría moderada. En junio de 2023, 36 municipios fueron catalogados en sequía extrema, caracterizada por mayores pérdidas en cultivos y forestales, y restricciones en el uso del agua debido a la escasez.
Desde enero de 2024, Atarjea, San Luis de la Paz, Victoria y Xichú alcanzaron la máxima categoría de sequía, excepcional, con una escasez total de agua en embalses, arroyos y pozos, y probable situación de emergencia.
Al corte de mayo de 2024, los municipios en sequía excepcional incluyen San Miguel de Allende, Atarjea, Doctor Mora, Dolores Hidalgo, San Diego de la Unión, San José Iturbide, San Luis de la Paz, Santa Catarina, Tierra Blanca, Victoria y Xichú. El resto permanece en condiciones de sequía moderada a extrema.
Disminuye producción de trigo y maíz
El secretario de Desarrollo Agroalimentario y Rural de Guanajuato, Paulo Bañuelos Rosales, afirmó que, a pesar de la sequía, no se reportaron grandes afectaciones al cierre de 2023, solo una reducción en la producción de cultivos.
Estamos esperando las lluvias en los primeros 15 días de junio. Ahorita no hay afectaciones. Ojalá y nos llueva, eso sí, hay que pedir a Dios que llueva, porque si no llueve definitivamente se viene una catástrofe para Guanajuato", sentenció.
Precisó que la presa Solís tiene capacidad para abastecer a los cultivos del distrito 011 por 2.5 riegos, lo que alcanzaría para unas 40 mil a 50 mil hectáreas. Además, hay áreas que se riegan mediante pozos.
Para más de 425 mil hectáreas de temporal ya se contrataron seguros para que, en caso de falta de lluvias, se pague a los agricultores su indemnización.
Bañuelos Rosales confirmó que durante 2023 dejaron de cultivar el 40% de la superficie destinada a la cebada, un grano que requiere mucha agua.
En otoño-invierno se redujo la superficie a cultivar por la cebada. No estamos de acuerdo con el cultivo de la cebada porque el agua de Guanajuato se la llevan a otros países en forma de cerveza. Pedimos a las empresas ayudar a tecnificar el campo en riego por goteo y así le entramos a cebada y a alfalfa”, expresó.
Recordó que no hay apoyo del Gobierno federal para contrarrestar la sequía y la falta de agua, ni para la tecnificación del campo.
Informó que la siembra de cebada se redujo entre 40% y 50%. La cebada se produce en el corredor industrial, Valle de Santiago, Irapuato, Salvatierra y Salamanca.
En cuanto a la producción de maíz, se obtuvo 1.2 millones de toneladas, una reducción de 100 mil toneladas. Se esperaba que cada hectárea generara entre 14 y 15 toneladas de maíz, pero la falta de agua lo redujo a 9 toneladas por hectárea.
El trigo también registró una reducción del 25% en su producción por la sequía, y aunque su precio bajó, esto no se reflejó en el costo final del pan.
'Reducen superficie a cultivar'
El Sistema de Información Agroalimentaria señala que los productores de riego y temporal en Guanajuato planean sembrar 719,691.14 hectáreas en 2024, un 14% menos que las 840,931 hectáreas proyectadas para 2023. Desde 2020, la superficie a cultivar se redujo debido a la sequía, según datos del Gobierno federal.
En 2023, se sembraron 788,952.9 hectáreas, cosechándose 706,683.34 hectáreas con un valor de producción de 37,218 millones de pesos. En 2022, se sembraron 836,800.01 hectáreas y se cosecharon 836,769.1 hectáreas, generando 38,248 millones de pesos.
'Se apoya a ganaderos del norte'
El gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, recordó que el estado distribuye pacas de alimento para ganado obtenidas del rastrojo en el distrito 011.
“El norte del estado está batallando para alimentar al ganado. Se realizan apoyos de forrajes; con SMAOT y SDAYAR se mandan máquinas para empacar el rastrojo en vez de que se queme, y se paga el flete para enviarlo al ganado del norte”, comentó.
Descartó que exista un riesgo de falta de alimentos, ya que la mayoría de los productores en el distrito 011 cuentan con agua suficiente para dos riegos. Los de temporal podrían sufrir si las lluvias no llegan.
HEP
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