Los daños ocasionados por el alto oleaje en la costa del Pacífico, a causa del fenómeno mar de fondo, evidenciaron fallas en la coordinación entre autoridades federales al emitir alertas tempranas ante este tipo de eventos.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y la Secretaría de Marina (Semar) tenían conocimiento desde el 28 y 29 de abril, respectivamente, que el sábado 2 de mayo se registrarían olas de hasta 4 metros.
Sin embargo, la Coordinación Nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación reconoció que las medidas de seguridad se activaron oficialmente un día antes, e incluso la Comisión Nacional del Agua -que tiene a su cargo el SMN- avisó el mismo sábado por la tarde.
El saldo reportado fue de tres muertos, tres desaparecidos, casi 600 viviendas siniestradas, más de 300 restaurantes dañados y otras afectaciones más en Guerrero, Oaxaca, Chiapas y Colima.
Aunque el mar de fondo no se encuentra en la lista de fenómenos naturales perturbadores para la declaratoria de emergencia, la Segob liberó recursos del Fondo para la Atención de Emergencias (Fonden) por inundación costera para los municipios de Acapulco, Técpan, Benito Juárez y Coyuca, en Guerrero; y para Pochutla, Colotepec, Huatulco, Villa de Tututepec, Santa María Tonameca y San Pedro Mixtepec, Oaxaca.
Pronóstico reservado
Jorge Zavala, jefe del Servicio Mareográfico del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México, indicó en entrevista que el SMN tenía con cuatro días de anticipación el reporte sobre la magnitud del fenómeno marino.
“El sistema de pronóstico mostraba olas de casi 6 metros para Acapulco y para Puerto Ángel, también en Lázaro Cárdenas se veían olas grandes y hacia Jalisco ya eran menores”, explicó.
La Dirección de Meteorología de la Semar también contó con un registro anticipado sobre la presencia del fenómeno y lo compartió con el SMN, de acuerdo con autoridades navales.
Juan Carlos Ramos Flores, titular de la dependencia, señaló que desde el miércoles 29 se avisó a los mandos regionales de Guerrero, Oaxaca y Chiapas sobre el pronóstico de marejadas, con lo que se dio inicio a acciones de aseguramiento de embarcaciones y del personal naval.
En tanto, Ricardo Cano Valenzuela, jefe del Grupo de Protección Civil de la Sección Tercera del Estado Mayor General de la Armada, indicó que, de acuerdo al protocolo, corresponde a los mandos regionales reunirse con integrantes del Comité Estatal de Protección Civil de cada entidad para coordinar acciones preventivas.
Consultado al respecto, Ricardo de la Cruz, director de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, sostuvo que las Unidades Estatales de Protección Civil de la costa del Pacífico iniciaron acciones preventivas desde el miércoles ante la presencia de oleaje inusual.
Entre ellas, la colocación de banderas rojas en las playas para indicar marea alta y recorridos por parte de las autoridades para advertir a la gente que no debía acercarse a la playa.
“Aún cuando no haya boletín, si ellos detectan algún fenómeno fuera de lo normal empiezan a activar sus protocolos”, apuntó.
Pero la alerta oficial por parte de Gobernación fue hasta el viernes 1, según lo declarado por el titular de la Coordinación Nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente.
“El día viernes se activaron todos los protocolos y medidas de seguridad ante la inminente presencia de alto oleaje”, reportó el lunes pasado en conferencia de prensa.
“El sábado 2 de mayo se comenzaron a registrar los efectos del mar de fondo desde las 7:00 horas en la costa del Pacífico, y derivado de la presencia de este fenómeno la Coordinación Nacional de Protección Civil emitió un alertamiento a las autoridades de Protección Civil de las entidades federativas del litoral del Pacífico”.
En el caso de Oaxaca, las autoridades alertaron a la población 5 horas después de que las olas empezaron a invadir las playas y golpear los comercios.
El sábado, a las 17:22 horas, la Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPCO) anunció el mar de fondo y prohibió la navegación.

Advierten vulnerabilidad

La población y la infraestructura en las zonas costeras están constantemente expuestas al impacto de fenómenos hidrometeorológicos como el mar de fondo ocurrido el pasado fin de semana, advirtieron especialistas.
Exhortaron a los habitantes y visitantes de esas zonas a no confiarse y acatar las recomendaciones de seguridad cuando existan banderas rojas que indican marea alta.

Por Reforma

Escrito en Guanajuato el 10/5/2015 · 00:00