Los Gobiernos federal y locales deben prepararse con tiempo, ya que 2016 significará menos recursos presupuestales, sostuvo el presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Pedro Pablo Treviño.
Al explicar que la propuesta de Presupuesto Base Cero implica revisar todo el gasto y definir recursos sólo a programas que estén funcionando, el legislador del PRI señaló que, desde ahora, se debe buscar que los ingresos coincidan con los gastos.
“Desde el inicio de este año, el escenario de los precios del petróleo apunta a que continuarán siendo bajos”, indicó.
“Para 2016 tenemos que prepararnos los diferentes niveles de gobierno para gastar menos y, por lo tanto, gastar mejor. Que al final del día los ingresos coincidan con los gastos y no se genere un déficit”, expuso.
En su ponencia en el Foro Internacional Presupuesto Base Cero, efectuado en la Cámara de Diputados, Treviño refirió que, en el entorno internacional, se advierte un bajo crecimiento que afectará especialmente a países emergentes, como México.
“Esta situación nos obliga a enfrentar con mesura e inteligencia una serie de determinaciones y, a su vez, nos hace más responsables de la ruta a seguir para consolidar un proyecto económico viable y perdurable”, dijo.
La planeación del presupuesto, estimó, pasará de una visión centrada en el ingreso y los gastos, a una donde lo principal sean los objetivos de los programas, la evaluación y el control de resultados.
El diputado advirtió que la decisión de construir un presupuesto con la llamada técnica Base Cero y los ajustes en el gasto, son medidas que se toman no porque haya ya un problema de finanzas públicas.
“Se hace para evitar un problema en la estabilidad económica y financiera”, aclaró.
Afirmó que desde ahora se debe afrontar un escenario de menores ingresos y garantizar que los recursos públicos se utilicen de manera eficiente y transparente.
“Para el próximo año se trabajará con una metodología de base cero, lo cual implica revisar completo el presupuesto, revisar la estructura programática y definir qué programas funcionan, cuáles no están cumpliendo con sus objetivos, cuáles no están bien evaluados”, describió.
El funcionario estimó que se debe trabajar en una reingeniería del gasto, como es revisar la estructura del presupuesto y de la administración pública, a fin de lograr un proceso de optimización de los recursos.
Se tratará, reconoció, de un ejercicio complejo para cambiar la forma en cómo se elaborará y asignarán los recursos públicos.
Destacó que, cuidando el entorno macroeconómico, también se evitará afectar a los más pobres.
“Las decisiones que se tomen para arribar al Presupuesto Base Cero reflejarán el compromiso con la ciudadanía y, en especial, con aquellos que menos tienen, que son los más vulnerables en estos reacomodos y vaivenes económicos”, indicó.