Bajo la dirección del actor Miguel Sepúlveda, la puesta en escena “Las niñas no deberían jugar fútbol” se presentó en el Teatro Rosas Moreno, dentro del festival cultural de Marzo, congregando a un público de todas las edades que disfrutó de la historia mientras hacían conciencia de las consecuencias de la incomunicación.

El desarrollo de la puesta en escena mantuvo el suspenso, mientras los espectadores conocieron la historia de Ana, una niña de doce años; Lidia, una chica de treinta y José, un hombre de cincuenta, que tuvieron un accidente automovilístico. Sus familiares al presentarse en el hospital se dan cuenta de que no saben quiénes son las otras personas que iban en el coche con ellos.
Mientras los protagonistas develan el misterio de ¿Quiénes son Ana, José y Lidia? ¿Dónde se conocieron? ¿A dónde iban? Y ¿por qué ninguno de ellos había hablado de la existencia de los demás?, se dan cuenta que la falta de comunicación y exceso de tecnología los convirtieron en alguien completamente “desconocido” para ellos.
La obra cuestionó las relaciones humanas desde los prejuicios, a través de un accidente que “pone en entredicho qué tanto sabemos de las personas con las que vivimos”.

Por Redacción AM

Escrito en León el 30/3/2014 · 00:00