Aumentan con calor casos de brucelosis
El año pasado se diagnosticaron 38 casos de brucelosis, cuyos casos aumentan en la temporada de calor.
El año pasado se diagnosticaron 38 casos de brucelosis, cuyos casos aumentan en la temporada de calor.
El epidemiólogo de la Jurisdicción Sanitaria III, el doctor Miguel Ángel Franco Grande, informó que durante el 2015 se reportaron 38 casos de Tuberculosis en todas sus formas, en los municipios de Apaseo el Alto, Apaseo el Grande, Celaya, Comonfort, Cortazar, Juventino Rosas, Tarimoro y Villagrán.
En su totalidad los pacientes fueron orientado y atendidos por la dependencia, además de brindarles el tratamiento oportuno y gratuito.
Franco Grande dio a conocer que la forma más frecuente de la tuberculosis es la pulmonar, la cual se sospecha cuando existe tos persistente y con flemas, en ocasiones acompañada de fiebre, sudoración nocturna, flemas con sangre, ataque al estado general, cansancio, entre otros.
En casos más graves puede producir endocarditis y neumonía. La fiebre suele subir durante la noche y disminuir durante el día, con períodos de oscilación (de ahí que se dé el nombre de fiebre ondulante a la enfermedad).
Por lo que se hace un llamado a la población a hacer conciencia de que esta es una enfermedad aún vigente, y para contrarrestarla es necesario tener un estilo de vida saludable, alimentarse bien, realizar actividad física, cubrirse la boca al toser o usar cubrebocas y practicar el lavado de manos.
En caso de presentar alguno de los síntomas, es necesario acudir a la unidad de salud más cercana y no automedicarse.
Una de las recomendaciones es no consumir productos lácteos que estén sin pasteurizar.
La Brucelosis, también llamada fiebre de malta, es una enfermedad bacteriana (infecciosa) que ataca a varias especies de mamíferos dentro de los cuales se encuentra el hombre, causando la Brucelosis humana.
Las vías de contagio al ser humano pueden ser oral, por contacto, respiratoria o parenteral. Por la vía oral, las bacterias pasan al aparato digestivo, siendo la fuente principal el consumo de leche no pasteurizada y sus productos lácteos, principalmente quesos.
Se debe revisar que los productos contengan la etiqueta, fecha de elaboración del producto, fecha de caducidad, marca del producto o nombre de quién lo elaboró, así como el domicilio en dónde fue fabricado.
Además de la leyenda “Elaborado con leche pasteurizada” y “Consérvese en refrigeración”.
AManece León
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