La industria refresquera hará en México una campaña millonaria y utilizará argumentos falsos para evitar que se apruebe un impuesto especial a las bebidas azucaradas, tal y como lo hizo en Estados Unidos, advirtió Jeffrey Ritterman, quien impulsó un impuesto similar en California, Estados Unidos. 
En su visita a México, el cardiólogo y activista de diversas agrupaciones civiles, afirmó que la industria refresquera hará todo lo que esté en sus manos para evitar que se le coloque un impuesto a sus productos. 
Ritterman puso como ejemplo lo que ocurrió en Richmond, California, donde se intentó establecer un impuesto de un centavo por onza de refresco. 
“La industria gastó 2.5 millones de dólares en una campaña que acaparó los anuncios espectaculares de la ciudad y se dedicó a desprestigiar él movimiento civil que lideraba, lo que impidió la aplicación del impuesto”. 
"Compraron todos los anuncios espectaculares. Decían que el impuesto afectaría a los pequeños comercios, es el argumento que usaron allá y el que usarán aquí. Circularon mentiras, le decían a la gente que el dinero iba a ser tomado por mí y que pretendía quedarme con todo lo recaudado por ese impuesto", recordó Ritterman. 
Invitado por la Alianza por la Salud Alimentaria, la cual agrupa a diversas organizaciones civiles mexicanas, el activista enumeró los argumentos que la industria refresquera utilizará y los contrastó con la realidad. 
“Primero, afirmarán que la obesidad es un problema complejo y no es correcto señalar cualquier causa como única”. En realidad, dijo “el azúcar líquida es la mayor responsable de la obesidad y detener su consumo ya es una mejoría”. 

Por El Universal

Escrito en León el 24/9/2013 · 00:00