Algunos pensarán que Leo Heras peca de modesto, pero mirando los números de la ofensiva de Charros esta temporada, el jardinero central de Jalisco tiene razón: no hay huecos.
“La ofensiva de nosotros, yo también le sigo buscando el hueco y no lo encuentro, hoy (ayer) no jugó Chuy (López) y jugó (Amadeo) Zazueta (en el campocorto) y lo hizo muy bien, bateó muy bien, es una ofensiva que las personas que vienen de la banca también te pueden llegar a resolver, como (Jesús) Cota que pegó jonrón en Obregón y no ve muchos juegos. Yo también no encuentro el hueco”, aceptó Heras al final del juego contra Mochis.
La ofensiva de Charros produjo 17 imparables, segunda mayor cantidad de la temporada, y 13 carreras para derrotar al otrora máximo rival: los Cañeros de los Mochis, por pizarra de 13-9.
Todos, con excepción de Brendan Harris, conectaron por lo menos un imparable, el “Niño” Heras pegó tres, dos sencillos y un doblete.
La ofensiva de Jalisco es la más poderosa de la Liga, con un promedio de .277, 13 milésimas más que el segundo lugar, es el equipo que más jonrones (43) y carreras producidas (201) tienen y por si fuera poco el que menos se poncha (215).
Pero todo eso valdrá de nada si no logran acabar con el ayuno de la franquicia de un título, el último que levantó fue en la campaña 1971-1972 como Algodoneros de Guasave.
Por ello, Charros firmó para la segunda vuelta a los infielders Brendan Harris y CJ Retherford, éste último cayó como anillo al dedo: batea para .467, con seis remolcadas y un jonrón.
“Parece que nos llegan de mejores a mejores, yo creo que vamos a tratar de irnos por un campeonato, ya nos toca y ojalá que sea el primer año aquí”, indicó el jardinero.