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Roban tráiler "federales"

El chofer declaró que los ladrones viajan en una camioneta con torreta y vestidos de negro para obligarlos a detenerse

Escrito en León el

Dos ladrones que se hicieron pasar como policías federales robaron un tractocamión cargado con abarrotes con un valor cercano al millón de pesos, sobre la carretera Querétaro-Celaya.
A las 6 de la tarde del domingo, a la agencia especializada en robo de vehículos en Celaya, se presentó el chofer para denunciar el robo.
El afectado señaló que para su trabajo, maneja un tráiler Kenworth blanco modelo 1999, que a su vez jala un remolque, que son propiedad de la empresa ‘Transportes Méndez Suárez’.
Sobre el suceso, refirió que el pasado 13 de septiembre salió de la bodega Colgate, que está en la carretera entronque a San José Iturbide, cargado con 23 toneladas de abarrotes, ya que se dirigía a la tienda Soriana ubicada en la ciudad de Guadalajara.
El día del asalto circulaba sobre la carretera federal a la altura del kilometro 34, cerca del puente que está en la comunidad de San José Agua Azul, que pertenece a Apaseo el Grande.
De acuerdo a la Subprocuraduría de Justicia de la Región “C”, en ese lugar vio por el retrovisor de su vehículo que se acercaba una camioneta con torretas prendidas con la leyenda “Federal”, la cual se le emparejó.
Uno de los tripulantes de la “patrulla”, le hizo señas con una lámpara para que se parara y pensando que se trataba de una inspección de rutina, el chofer se detuvo.
Del vehículo se bajó un hombre vestido con uniforme negro, al tiempo que le pidió que le mostrara su licencia, los documentos del vehículo y que además le enseñara los sellos de la caja donde cargada el producto.
En el momento en que se encontraban en la parte trasera, se acercó otro cómplice, que lo sujetó de la cabeza y lo metió agachado a la camioneta, mientras que una tercera persona se llevaba el tráiler con la carga.
Al chofer lo trajeron paseando por dos horas y en un lugar desconocido lo bajaron y le ordenaron que caminara hacia el cerro y que no saliera a la carretera hasta después de que ellos se fueran.
Cuando el afectado se dio cuenta de que los ladrones se habían retirado, comenzó a caminar de regreso y al llegar a un pueblo fue informado que se encontraba en Pedro Escobedo, Querétaro, luego avisó al propietario sobre del robo.

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