Desde San Julián, Jalisco, viene a San Francisco a comercializar queso, crema y cajeta, trabajo que comenzó desde hace 40 años el señor Venancio Salcido, quien recorre las calles de la ciudad para entregar puerta por puerta, llevando siempre su diablito y la buena atención al cliente.
Lunes, jueves y sábado, muy temprano toma el camión en su natal San Julián, Jalisco, para venir a entregar sus productos en nuestra ciudad, donde por la buena calidad de estos ya lo tienen bien ubicado en entregas puntuales en varias casas.
Miguel Verdín da fe de ello al asegurar: “Yo tengo muchos años de comprarle el queso para las quesadillas y siempre me lo trae fresco y muy sabroso”.
Además de comerciante, don Venancio también se dedica al campo, donde trabaja en los cultivos los martes, miércoles y viernes, que son los días que no viene a San Francisco, incluso trabaja colocando cercas, aseando potreros y todo lo que el patrón le diga.
Se trata de trabajar “para ajustar para el chivo de la casa”, donde vive con su esposa y tres de sus hijos, dos mujeres y un hombre, no es fácil cumplir con el gasto, se riega mucho el dinero e implica muchos gastos el poder visitar semana a semana la ciudad, sólo para traer los quesos el camión le cobra 40 pesos por las cajas, a eso hay que sumarle su pasaje, por eso la ganancia no es mucha, pero sale para comer los cinco de la casa, juntando las ventas y el sueldo, asegura el señor Venancio.

Por Redacción

Escrito en León el 7/4/2015 · 00:00