Padres de familia de la primaria José Pablo Moncayo, ubicada en Laureles del Campanario, se manifestaron ayer fuera de las instalaciones educativas, para solicitar a la supervisora no abusar de su cargo en la escuela.
Los padres de familia acordaron una cita para hablar con Julia Marcia Hernández Barajas, supervisora, la maestra no acudió y los padres de familia sólo estuvieron afuera de la escuela manifestando su inconformidad por el abuso de cargo.
“Pedimos la reubicación de la supervisora porque su oficina es más grande que la dirección, además que ella no tiene ningún derecho de estar en esta escuela porque no hay un oficio donde así lo especifique”, dijo Leonardo Trejo, presidente de la Sociedad de Padres de Familia.
La situación actual que presenta la escuela es que Hernández Barajas cuenta con una oficina particular para ella y su secretaria. Dicha oficina es de gran espacio y tiene baños privados, mientras que el director cuenta con un espacio pequeño para él, los profesores, personal de intendencia y para los padres de familia cuando llegan a hablar con él.
“Las oficinas de la supervisora son privadas cuando hay carencias por parte de los maestros, ya que ellos tienen que asistir a los baños de los niños”, explicó Leonardo Tejo.
“Ya hemos hablado con ella y nos pidió tiempo, pero en ese tiempo logré una destitución del cargo como Presidente de los Padres de Familia”, agregó.
El oficio no procedió contra Leonardo Trejo, porque los únicos que lo pueden sustituir del cargo son los padres de familia que conforman la asamblea.
“Esperamos que esto no llegue a mayores y que la supervisora llegue a un acuerdo con nosotros y se arreglen las cosas”, enfatizó.
Ayer se tenía una cita entre la asamblea de los padres de familia y la supervisora a las 9:30 de la mañana que acordaron por parte de la DRSE, sin embargo nunca llegó la supervisora, por lo que los padres de familia se sintieron ignorados.
“Está mal que la supervisora se haya apropiada de las oficinas cuando el director tiene su oficina mal, además que en las juntas ella es la que opina y no deja que el director tenga sus funciones, y estamos todos aquí y ella no se presentó, no tiene respeto para con nosotros”, indicó María Agripina, madre de familia.
“Se han ocupado salones para educación física o hacer un salón de cómputo, pero la supervisora ocupa un lugar que no le corresponde y se puede aprovechar para otra cosa”, dijo a su vez Rocío Hernández, madre de familia.

Por Redacción AM

Escrito en León el 10/12/2015 · 00:00