La organización México Evalúa aseguró que los resultados de la Auditoría Superior de la Federación (ASF) sobre el programa de laptops de la Secretaría de Educación revelan la historia de un desastre anunciado.
“No solamente hay problemas de precios altos de los equipos, sino que, lo más grave, es que el programa no cuenta con una política educativa que lo acompañe”, criticó Marco Fernández, investigador de México Evalúa.
Dijo que investigadores, especialistas, organizaciones civiles y legisladores demandaron a la SEP crear el programa y que éste pusiera énfasis en la capacitación docente, entre otras.
“Sin embargo, no hay evidencia de cómo adaptaron o cómo fue el programa acompañado por cursos de capacitación para los docentes para adaptar la forma en que están enseñando en el salón de clases”, indicó el también investigador del Tecnológico de Monterrey.
“No hay evidencia de cómo ajustaron los planes de estudio o materiales educativos para que los niños pudieran utilizar estos instrumentos en su aprendizaje”, expresó.
Al mismo tiempo, señaló, el programa de entrega de laptops carece de una estrategia para atender las fallas de los equipos ante la falta de centros de servicios en las entidades.
De acuerdo con las observaciones de la ASF, realizadas al programa de entrega de laptops 2013, las máquinas salieron caras y defectuosas, y la mayoría no se usan o están descompuestas.
Además, los 240 mil equipos terminaron costando 2 millones 160 mil dólares más caras que el precio originalmente pactado en la licitación pública.
Para Fernández, el informe de la ASF revela que en México se siguen haciendo políticas públicas a partir de la ocurrencia y la rentabilidad política, y no a partir de la evidencia de lo que puede servir para la educación.
“Entiendo la rentabilidad política de un programa de esta naturaleza, dada la visibilidad de las laptops, y el argumento de dar habilidades digitales a la población. Lo que no han terminado de entender nuestros políticos es que la rentabilidad política no necesariamente está peleada con el buen diseño de la política pública”, opinó.
El especialista cuestionó además que las máquinas que se hayan comprado sean de baja calidad.
“En el centro de todo, está el dicho popular de que lo barato sale caro”, reprochó.

Por Redacción AM

Escrito en León el 19/2/2015 · 00:00