La Tierra se está deteniendoooo....- Dr. Gonzalo Páez Padilla
Muchos conocemos el popular cuento “El Principito”, escrito por Antoine de Saint-Exupéry.
Muchos conocemos el popular cuento “El Principito”, escrito por Antoine de Saint-Exupéry. El cuento narra las aventuras del Principito quien visita varios planetas: el de un rey obsesionado con ser obedecido, el de un engreído que su razón de ser es que lo admiren y lo halaguen, el de un alcohólico que toma para olvidar la vergüenza que le da ser alcohólico, el de un hombre de negocios que cuenta y cuenta sus “riquezas” pero no las disfruta, y el de un farolero muy infeliz por seguir devotamente una regla que ya ha perdido su sentido.
Nos cuenta también que el asteroide donde habita el Principito es muy pequeño y completa una rotación sobre su eje cada 4 horas: en un sólo día el Principito pudo ver hasta 43 puestas de sol sólo recorriendo su silla unos cuantos pasos. Mientras nuestro planeta da un giro en 24, en planetas como Venus es tan lento que tarda más de 242 días terrestres y en Júpiter es tan rápido que lo hace en menos de 10 horas; así, una jornada escolar de 6 horas en la Tierra serían 40 días en Venus, o sólo un par de horas en Júpiter. La velocidad de rotación de la Tierra es de 1,524 kilómetros por hora (km/h). Cuando comparamos la velocidad rotación de la Tierra con otros planetas encontramos que la de Venus es sólo de 6.5 km/h mientras que la de Júpiter es de más de 45,000 km/h (un viaje de América a Europa tomaría 12 minutos, wow!!!). Y si nos parece una velocidad muy grande, pues tratemos de dimensionar la de traslación terrestre alrededor del Sol que es de 107,000 km/hr (a esa velocidad un maratonista haría su carrera en 1.4 segundos); afortunadamente no sentimos el desplazamiento porque es movimiento con velocidad casi uniforme, como cuando viajamos en un avión o en un tren, si no volteamos hacia fuera por una ventanilla prácticamente no sabemos que nos estamos moviendo.
Por otro lado, también nos relatan en el Principito que la rotación del planeta del farolero se está acelerando, y que un día tiene una duración de solo un minuto. Pues bien, la Tierra, por lo contrario, lleva millones de siglos desacelerando. Hace unos 2,460 millones de años, la tierra rotaba muy rápido, un día duraba 17 horas; hace 1,400 millones duraba 18.7 horas, y hace 620 millones de años siguió alargándose (a 22 horas). Así, durante un año (una vuelta al sol) la tierra rotaba más de 500 veces, es decir, un año veía 500 días con sus noches, en lugar de 365. Días más cortos tuvieron implicaciones muy importantes en la evolución de la vida, por ejemplo, los procesos biológicos se repiten sincronizados con la duración del día, ciclo conocido como ritmo circadiano.
Ahora, ¿por qué se reduce la velocidad de rotación terrestre? Cualquier objeto que gira (un yoyo, un trompo, una llanta que hacemos rodar) cuando transfiere su energía de rotación a su entorno (por fricción por ejemplo) girará cada vez más lento hasta que se detiene. Una de las principales causas de la desaceleración es la atracción gravitacional entre la tierra y la luna: parte de la energía de rotación de la tierra se transfiere a la protuberancia de la marea y otra parte a la luna. Esa energía transferida a la luna ha provocado que su separación de la tierra aumente 60,000 kilómetros en 2,500 millones de años. El propio calentamiento global desacelera la rotación terrestre porque cuando los polos se derriten, existe más masa de agua en el ecuador. Adicionalmente, en verano la rotación se acelera un poco y en invierno se reduce por la cercanía o lejanía del Sol de nuestra órbita elíptica.
El alargamiento de los días es muy pequeño cada año, y podemos medir con mucha precisión la rotación terrestre con una técnica llamada “interferometría de línea base muy larga” usando una base de tiempo con “relojes atómicos” inventados en 1950. Para darnos una idea, el error de los relojes atómicos es de solo un segundo cada 300 millones de años. Como los relojes atómicos son tan estables, pero la duración del día se va haciendo más larga, desde 1972 se le han tenido que añadir 30 segundos bisiestos. Aunque parecieran pocos segundos su discrepancia tendría implicaciones importantes: el Tiempo Universal Coordinado garantiza la sincronización de las operaciones y horarios de la aviación, la confiabilidad de los sistemas de navegación, mantienen la coherencia global de las comunicaciones e internet, la localización precisa del GPS, y la estampa de tiempo de operaciones financieras. De forma inusual, la tierra se está acelerando años recientes, lo que supone que habría que quitarle tiempo al reloj, que implicaría una duplicación de estampas de tiempo con el caos que la ambigüedad generaría.
El Principito nos brinda una reflexión sobre el absurdo de ciertas conductas humanas, y de forma incidental, hoy nos permitió reflexionar sobre la rotación terrestre y su afectación por mareas o el calentamiento global, o cómo impactaría nuestra vida diaria (internet, GPS, operaciones financieras) si se desincroniza nuestro sistema de registro de tiempo de la rotación terrestre. La rotación terrestre es algo tan cotidiano que nos pasa desapercibido. Pero he aquí el secreto del zorro a su amigo el Principito, “L'essentiel est invisible pour les yeux” (lo esencial es invisible para los ojos), y es a través de la reflexión y el análisis que podemos desvelar lo profundo en oposición a la percepción ordinaria, y hacernos conscientes de la esencia.
Dr. Gonzalo Páez Padilla
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