Pese al tiempo caluroso, la picadura de alacranes en el estado,ha disminuido, informó la Secretaría de Salud.

La mencionada dependencia, informó que hasta la semana “epidemiológica” 18 de este año, se han registrado 11 mil 161 casos de picaduras de alacrán en Guanajuato, cifra inferior a los 12 mil 303 casos del 2012.

Dato incongruente a la temporada, coincidió personal de la Cruz Roja delegación León. Pues incluso hace un mes el director del Hospital General Regional (HGR) de León Carlos Antonio Gahona Reyes confirmó que de mayo a junio hay un incremento de plagas y por lo tanto de picaduras.

“En la temporada de calor es cuando más aparecen las plagas, los insectos que afectan a leoneses, principalmente de mayo a julio”, comentó Gahona Reyes.

En la misma delegación de la Cruz Roja en León, una tabla de servicios durante el 2011, informa que en aquel año se atendieron cinco mil 500 picaduras de alacrán, número de atención que se suma a los 85 mil 816 servicios de hace dos años.

Según las recomendaciones de la Secretaría de Salud, ante una picadura de alacrán es importante “concurrir con rapidez a la unidad de salud más cercana para ser atendido y evaluado a la brevedad”, pues “toda vez que la picadura de un alacrán es accidental y está considerada una emergencia médica”.

La aplicación del antídoto para la picadura de alacrán en la Cruz Roja actualmente tiene un costo de 500 pesos.

La invitación del sector salud, para el cuidado de las picaduras, dicta un informe, es un compromiso de acuerdo a los lineamientos del Eje “Más Calidad de Vida”.

Algunos síntomas

En los niños provoca: llanto, palidez, nauseas, vómitos, salivación excesiva, piel de gallina y palpitaciones.

El efecto que el veneno de alacrán tome depende de la persona afectada: su peso, su estado nutricional, la presencia de algunas enfermedades y de la especie de alacrán, el número y lugar de la picadura, la cantidad de veneno inyectado.

Por lo general, la picadura sucede de noche y la población más afectada son los niños pequeños.

Por Monzerrat J. Alvizu

Escrito en Opinión el 9/6/2013 · 00:00