Realizan alegre marcha cientos de monaguillos
Alrededor de 300 niños se reunieron en la parroquia del Señor de la Salud del Barrio Arriba para participar en la misa y en la Pre Marcha del Monaguillo
Los monaguillos de León se concentraron en la parroquia del Señor de la Salud del Barrio Arriba para participar en la Pre Marcha del Monaguillo; se reunieron alrededor de 300 niños y jovencitos pertenecientes al menos a 13 templos del municipio.
Primero se realizó una misa concelebrada, presidida por el padre Cristian Roberto Cerda Reynoso, promotor vocacional del Seminario Diocesano de León; lo acompañaron en la liturgia el vicario Héctor Alexis Rocha Estrada, del Barrio Arriba, y el padre Juan Ramírez Flores, de la Divina Providencia.
El oficiante tomó como punto clave la Parábola del Hijo Pródigo (Lucas 15: 11-32) y exhortó a los asistentes, pero en especial a los pequeños monaguillos, a inclinarse por el bien. Les hizo saber que en Dios Cristo, siempre encontrarán a un padre comprensivo, amoroso y que los perdonará si han cometido pecado

Es necesario ser caritativos, comprender y ayudar a los demás, explicó e hizo un llamado a la reconversión, sobre todo en este periodo previo a la Semana Santa.
“Entre hermanos no enemistarse, Cristo desea y proclama la amistad”, refirió el sacerdote oficiante.
¿Qué pasa cuando le sacan la lengua?, preguntó a los monaguillos. No hubo respuesta, pero sí miradas furtivas. Cerda Reynoso contestó asimismo: “Creo que aquí no pasa eso, creo que es en otro lugar, ¿verdad? Nos debe alegrar, que otros que estaban alejados de Dios, vuelvan a la casa de Nuestro Señor Padre Todopoderoso”, externó.
Las agrupaciones que concurrieron a la Parroquia del Señor de la Salud, corresponden a la IV Zona Pastoral de la Madre de La Luz.

La música para el acto eucarístico corrió a cargo del ministerio “Música - Misión de Cristo”. Tras dar la bendición el vicario Alexis Rocha dio indicaciones para la procesión, la cual llegaría al Calvario, donde se daría una breve semblanza del santo José María de Yermo y Parres.
Los pequeños iniciaron su marcha tomando la calle de 27 de Septiembre, y alegraron las calles como Constancia, Allende, Cuauhtémoc y Aquiles Serdán con su presencia y sus cantos, hasta llegar al Templo de San Nicolás Tolentino.
A la cabeza iban los chicos de la parroquia del Señor de la Salud, ataviados como trabajadores de la curtiduría. Se escuchaban cánticos como ¡Se ve, se siente, el monaguillo está presente!.
Algunos pequeños llevaban carteles con frases como: “Yo soy feliz caminando con Jesús” “Yo quiero ser santo”, como los de la Escuela de Monaguillos del Oratorio de San Felipe Neri. “Alabar, hacer reverencia y servir a Jesús mi Rey”, se leía en un estandarte.
Al llegar a San Nicolás Tolentino, el padre Julio Ramírez, en forma sencilla les explicó a los pequeños la labor del monaguillo, cuya misión es servir a Dios; posteriormente continuaron su trayecto hasta el Calvario.
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