Sin avances en la recuperación de la Sala María Teresa Rodríguez
El recinto fue creado para albergar a la Orquesta Sinfónica y la Banda Sinfónica del estado, ambas sin recinto propio.
La Sala de las Artes María Teresa Rodríguez, ubicada en el Parque del Maestro en Pachuca, corre el riesgo de quedar fuera del resguardo estatal, a pesar de que la Secretaría de Cultura de Hidalgo había manifestado su interés en recuperar el espacio.
Hasta ahora, no existe ningún trámite oficial iniciado para revertir el comodato que mantiene el ayuntamiento de Pachuca sobre el recinto.
El espacio cultural fue planteado por la propia Secretaría como la sede ideal para albergar a la Orquesta Sinfónica y la Banda Sinfónica del estado, ambas sin recinto propio.
Sin embargo, a más de un mes de haber anunciado las intenciones de recuperación, la dependencia reconoce que la gestión no ha comenzado.
“Es un tema de oficialía, la primera intención sí era esa, porque buscábamos un espacio como ese”, reconoció Neyda Naranjo Baltazar, titular de la Secretaría de Cultura, tras ser cuestionada al respecto luego del acto conmemorativo por el natalicio de Benito Juárez.
Actualmente, la sala continúa en comodato bajo control del ayuntamiento de Pachuca, a través del Instituto Municipal para la Cultura, y es sede oficial de la Orquesta Filarmónica de Pachuca.
En tanto, la Banda Sinfónica estatal realiza sus ensayos y presentaciones en el Centro Cultural del Ferrocarril y, desde hace poco, en la Casa de las y los Adolescentes, un espacio operado por el Sistema DIF Hidalgo.
De acuerdo con la funcionaria, este nuevo espacio ha sido bien recibido por la agrupación y por el público asistente.
“La banda está muy contenta con ese espacio, hemos tenido llenos totales”, afirmó Naranjo Baltazar, quien también destacó la cercanía del recinto con las zonas habitacionales.
En febrero pasado, la secretaria de Cultura había confirmado que la recuperación de la Sala María Teresa Rodríguez estaba “en proceso administrativo”, con el objetivo de consolidarla como sede de las agrupaciones musicales estatales.
A pesar de ello, las declaraciones más recientes indican que no existe una ruta clara para que el espacio cultural pase a manos del gobierno estatal.