Priorizan ahora jóvenes divertirse más que tener un patrimonio; se vuelve caro adquirir vivienda
Investigador de la UG indica que uno de los desafíos actuales para las nuevas generaciones es encontrar un primer empleo con un sueldo suficiente para la subsistencia.
Guanajuato capital.- Ahora, los jóvenes priorizan “vivir”, divertirse más, que tener un patrimonio.
Alejandro Mosiño Jasso, profesor adscrito al Departamento Economía y Finanzas de la Universidad de Guanajuato (UG), alerta sobre la tendencia de las nuevas generaciones en privilegiar la diversión por encima de constituir un patrimonio, fenómeno que, dijo, se debe en gran medida a lo caro que se ha vuelto comprar una vivienda.
Ahora se prioriza vivir y divertirse, antes que tener un patrimonio”, observó el investigador de la UG sobre el escenario económico entre las nuevas generaciones y considerando el posible impacto que se pudiera generar en caso de que el país vecino, Estados Unidos de Norteamérica, aplique aranceles.
Si bien el experto en economía señaló que las complicaciones financieras para los jóvenes son una realidad que diariamente enfrentan, estos son factores que no solo son económicos, sino que se derivan de rasgos culturales e ideológicos que han sido consecuencia de procesos histórico-económicos que han marcado la historia de la sociedad en las últimas décadas.

Monsiño dijo considerar que uno de los principales desafíos, actualmente, es encontrar un primer empleo con un sueldo suficiente para la subsistencia, aunque dicha problemática no es exclusiva de una generación, pero sí más acentuado entre la juventud actual.
Indicó que gastos relacionados con aspectos que, en otro momento, se consideraban necesidades básicas, ahora constituyen un lujo inaccesible para muchas personas, particularmente, la vivienda propia.
“El fenómeno es multidimensional. Si hablamos de Guanajuato capital, creo que es bastante evidente que la escasez de vivienda la encarece. Construir es complicado por las características geográficas y los tipos de estructuras, además de la visita, a veces permanente de turistas y personas extranjeras, quienes tienen más recursos y ofrecen más por la renta o compra; eso aumenta la competencia para la gente que viene a estudiar o trabajar”, indicó.
En cuanto al efecto inflacionario, señaló que este, junto con el nivel salarial, incrementa la dificultad para acceder a la vivienda independientemente de la edad, pues los recursos se destinan a satisfacer necesidades inmediatas, como la alimentación y una vez cubierto este aspecto, resulta interesante observar que se opta por priorizar actividades de esparcimiento, mientras que la inversión para la vivienda queda rezagada.
Creo que la sociedad ha cambiado su forma de ver el mundo. Anteriormente, el desarrollo económico empezaba mucho más rápido; la prioridad era tener un patrimonio para heredar y salvaguardar a la familia, esposa, esposo, hijos; se compraba una casa, un terreno, algo que les diera un sustento en caso de faltar; se podía ahorrar pronto porque se tenía la aspiración de dejar algo listo a los 50 años.
“Los avances científicos y la evolución de la especie humana también han hecho que vivamos más tiempo, hasta los 70 u 80 años. Ahora, los jóvenes priorizan vivir, divertirse más que tener un patrimonio, quizás porque la concepción de la juventud se ha extendido más allá de los 18 años, 20, 25, 30, y eso hace que la manera de ver la vida adulta sea distinta. También ha cambiado la dinámica social. Si bien, se tiene conciencia de que tener una casa es importante, pero se prioriza el adquirir un carro, aunque es un patrimonio a medias”, expresó Monsiño.
Alejandro Mosiño Jasso posee una formación en Ciencias Económicas en la UG, en la Université de Lausanne, en Suiza, y la Université de Grenoble, en Francia, además de su práctica docente.
HLL
Valor Agregado
Deja tu correo y entérate de todo lo que pasa en el mundo de los negocios y finanzas en Guanajuato y México.
