Estados Unidos quedó ayer inmerso en una nueva crisis fiscal, luego de que la Casa Blanca y el Congreso fracasaran en alcanzar un acuerdo para evitar recortes automáticos en el gasto público que disminuirán el crecimiento de la primera economía mundial.

Los recortes, conocidos como el “secuestro”, forzarán al Gobierno federal a licenciar personal, reducir salarios y subsidios y giros a otros países, al recortar el gasto en Defensa en 13% y el resto de los programas en un 9%. El ajuste previsto para este año fiscal alcanza los 85 mil millones de dólares.

“No todos sentirán el dolor de estos recortes de gastos de inmediato. Pero el dolor será real. Comenzando esta semana, muchas familias de clase media tendrán sus vidas perturbadas en forma significativa”, dijo ayer el presidente Barack Obama durante una rueda de prensa en la Casa Blanca luego de una reunión con líderes de ambos partidos del Congreso.

Un estudio de Macroeconomic Advisers estimó que el crecimiento de la economía de Estados Unidos caerá este año 0.6 puntos porcentuales, a un 2% anual, debido al ajuste fiscal.

Con todo, los mercados de Wall Street cerraron ayer con leves alzas.

Esta es la cuarta crisis fiscal que vive el País desde que Obama llegó a la Casa Blanca.

En 2011, los republicanos en el Congreso amenazaron, primero, con cortar el financiamiento al Gobierno federal, y, luego, con negarse a elevar el techo de la deuda. Y a fines del año anterior, Estados Unidos logró eludir el llamado “abismo fiscal” en el último minuto, luego de tensas pláticas durante el Año Nuevo.

Los recortes automáticos que comenzaron a regir ayer eran el último sobreviviente del llamado “abismo fiscal”. A principios de este año, demócratas y republicanos se habían dado más tiempo para negociar un acuerdo que permitiera eludir el tijeretazo de un billón de dólares en 10 años. Esa concesión resultó infructuosa.

Tal como ocurrió antes, los republicanos se negaron a aceptar cambios en los impuestos que hubieran significado un alza de la presión tributaria, mientras que los demócratas rechazaron recortes más profundos en el gasto público.

“Vamos a ser claros. El Presidente tuvo su aumento de impuestos el 1º de enero. La discusión sobre los ingresos, en mi opinión, está terminada. Se trata de asumir el problema de gastos aquí en Washington”, dijo el presidente de la Cámara baja, John Boehner.

Obama recibió ayer en la Casa Blanca a Boehner; el líder republicano del Senado, Mitch McConnell; el líder demócrata de la Cámara alta, Harry Reid, y la líder de los demócratas en la Cámara baja, Nancy Pelosi.

Tras el infructuoso encuentro, demócratas y republicanos se culparon mutuamente, un desenlace similar al de crisis fiscales pasadas.

Pese al fracaso, empero, las negociaciones entre la Casa Blanca y el Congreso para alcanzar un nuevo acuerdo continuarán.

Con todo, algunos efectos, que van desde una menor disponibilidad de vacunas contra el sarampión y la tosferina, hasta mayores esperas en los aeropuertos para ingresar al País porque la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza tendrá menos personal, comenzarán a sentirse en las próximas semanas.

Los republicanos dijeron que la culpa es de Obama, por insistir en que los aumentos de impuestos sean parte de la solución.

“Esta no es una victoria para nadie. Esto es una derrota para el pueblo estadounidense”, afirmó.

“Yo no soy un dictador. Yo soy el Presidente”, afirmó, y agregó que no puede utilizar la técnica de control mental aplicada por los caballeros jedi de la Guerra de las Galaxias para obligar a alguien a cambiar de opinión, dijo el Presidente.

Eso, hasta que Washington no logre salir de una crisis gestada allí mismo.

Las claves  del ‘secuestro’

¿Por qué el ‘secuestro’?

La Constitución de Estados Unidos exige al Presidente enviar su propuesta de los presupuestos federales cada año al Congreso, que deberá ratificarlos en forma de ley. Si carece de mayoría en el Congreso, el partido en el poder debe ponerse de acuerdo con la oposición para sacarlos adelante.

¿Cuándo empieza el recorte?

Obama tenía que firmar este viernes la orden para autorizar los recortes automáticos de 85 mil millones de dólares en programas repartidos en varias áreas, desde educación a defensa o sanidad. En total, las arcas federales deberán gastar 100 mil millones de dólares menos este 2013, entre el 8 y el 9% del presupuesto federal.

¿Quiénes son más afectados?

Más de la mitad de la reducción del presupuesto, un total de 55 mil millones de dólares, deberá acometerse en el Departamento de Defensa. Esto no afectará directamente al salario de los miembros del Ejército, aunque sí eliminará algunos de los beneficios de los que disponen, como pólizas de seguro o planes de pensiones. Según el Presidente, el “secuestro” ya ha impedido la flota de un portaaviones hacia el Golfo Pérsico.

‘No se pueden evitar bodas gay’ 

Citando el principio de igualdad que impulsó la creación de la nación, el presidente Barack Obama se pronunció el viernes contra la ley de California que prohíbe el matrimonio gay y dijo que la Corte Suprema debe derogarla.

Un día después que su Gobierno presentó ante el alto tribunal un documento que exhorta inequívocamente a los magistrados a derogar la Propuesta 8 de la boleta electoral, Obama dijo que en su opinión no había manera de soslayar el caso.

“Creo que es importante que digamos lo que creemos y lo que esta Administración defiende”, dijo el Presidente.

La nación ha pasado por la misma evolución que él sobre cómo la ley debe tratar a las parejas gay, dijo Obama, que otrora se opuso al matrimonio gay pero cambió de postura el año pasado durante la campaña de reelección.

“Creo que esto es algo profundamente positivo”, expresó Obama en una conferencia.

Es la primera vez que un Presidente de Estados Unidos exhorta a la Corte Suprema a ampliar los derechos de los gay.

Por Reforma

Escrito en Guanajuato el 2/3/2013 · 00:00