¿Por qué después de los 30 empeoran las resacas?
A medida que envejece, el cuerpo no funciona tan bien como solía hacerlo
El beber alcohol siempre genera estragos en nuestro organismo, su consumo se relaciona con la depresión del sistema nervioso central, y da lugar a la perturbación de sus funciones, disminución de la actividad motora y altera la percepción de sí mismos y de los demás.
La sensación de deshidratación, dolor de cabeza, mareos y escalofríos son algunos de los síntomas de la resaca, producida por la ingesta mayor de alcohol y se manifiesta al siguiente día u horas después de beber.
La edad puede influir en la gravedad de la resaca y, según una estudio del grupo británico Redemption, el efecto de la resaca es aumenta a partir de los 30 años de edad.
La investigación señala que, a medida que envejece, el cuerpo no funciona tan bien como solía hacerlo y si disminuye el consumo de alcohol equivale a menos tolerancia.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos y el Instituto Nacional sobre Abuso de Alcohol y Alcoholismo (NIAAA), señala que la forma en que se procesa el alcohol en el cuerpo:
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Aproximadamente el 25% del alcohol se absorbe directamente del estómago al torrente sanguíneo, el resto se absorbe del intestino delgado.
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Las bebidas con una mayor concentración de alcohol y bebidas carbonatadas (champaña) generalmente se absorben más rápido, especialmente con el estómago vacío. Su hígado (que también comienza a disminuir la tolerancia con la edad) procesa entre 90 y 98% de alcohol y el otro dos a 10% se elimina a través de la orina, se expulsa a través de los pulmones o deja el cuerpo en sudor.
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A medida que envejecemos, nuestro metabolismo se ralentiza y aumenta la grasa corporal. Las personas con porcentajes más altos de grasa corporal tienen menos deshidrogenasa, la enzima que descompone el alcohol en el estómago, lo que resulta en una mayor concentración de alcohol en la sangre y menor tolerancia.
Las mujeres llevan hasta un 10% más de grasa corporal que los hombres, y los porcentajes de ésta aumentan con la edad en ambos sexos, lo que provoca llegar a un estado de ebriedad más rápido.
El beber con moderación es la alternativa para no sufrir la resaca o bien aminorar sus efectos después de los 30 años.