Llega José Luis en carretilla al IMSS Huejutla; lo dejan sin apoyo
José Luis Martínez, de 19 años de edad, dejó de recibir el programa Bienestar para personas con discapacidad del gobierno federal, y sus familiares desconocen el motivo
Para llevar a José Luis Martínez a su consulta en el IMSS de Huejutla, tienen que trasladarlo en una carretilla con tal de que pueda sobrevivir a su enfermedad.
El joven dejó de recibir el programa Bienestar para personas con discapacidad del gobierno federal, ante la preocupación de sus familiares que desconocen el motivo y tratan de ayudarlo.
Sin embargo, el muchacho, como le llaman sus padres, necesita el recurso para enfrentar el padecimiento que lo mantiene postrado en una cama desde hace más de cinco años, y, así, mejorar su estado de salud.
Cada día que pasa pudiera ser el último de este joven que está por cumplir 19 años de edad, 13 de los cuales los pasó viajando con su papá a México para consultar a especialistas.
Distrofia muscular y crecimiento de uno de sus órganos que le puede provocar la muerte, es el diagnóstico.
ORIGINARIOS DE LA HUASTECA
Pedro Martínez, papá del joven, narró que cada vez es más difícil adquirir los medicamentos para que José Luis enfrente el padecimiento con mayor dignidad.
Son originarios de la Huasteca hidalguense; sin embargo, por falta de dinero para rentar en Huejutla, aceptaron una casita prestada en un lugar llamado Loma Orca, del municipio de Chalma, Veracruz, espacio que colinda con la ciudad de Huejutla.
Don Pedro recordó que durante 13 años llevó a su hijo a un hospital de la Ciudad de México, lugar donde le diagnosticaron el padecimiento crónico degenerativo.
UNA CARRETILLA
"Por la situación física de mi hijo resulta imposible llevarlo en una silla de ruedas, por eso utilizo la carretilla para sacarlo del lugar y después, cuando hay dinero llevarlo en taxi a su cita médica, es muy complicado", narra Don Pedro.
Los familiares de José Luis tampoco cuentan con recursos para comprar los medicamentos, además de que el apoyo del Bienestar para personas con discapacidad les dejó de llegar sin ninguna explicación.
Situación que, agrega, les complica todo, pues no tienen dinero. Don Pedro gana 150 pesos por cada jornal.
Por ello, solicita a las autoridades estatales y federales ayuden a José Luis Martínez, cuya salud empeora con el paso de los días.
Al grado que le resulta difícil conciliar el sueño y soportar los dolores que le produce la distrofia muscular que padece desde hace ya varios años.
Don Pedro y su mujer están conscientes de que su muchacho tiene una enfermedad incurable que en algún momento lo llevará a la muerte.
Pero agregan que mientras esté vivo van a luchar por darle lo mejor y piden a la gente solidarizarse, pues requieren medicamentos, pañales y algunos alimentos especiales.