León, Guanajuato.- Más de 200 mil pesos mensuales de cable y material eléctrico roban a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) Zona León, una situación que provoca fallas en la energía eléctrica y puede ser mortal para aquellos que sustraen el material.

Medardo Rodríguez Morales, superintendente de la Zona León, señaló que una problemática constante en la zona es el vandalismo.

Todo lo que es instalaciones subterráneas, por un pedacito de cobre que nos roban, el sistema se queda sin blindaje, cuando hay una sobre corriente se daña el cable", dijo.

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Expresó que el robo del material les cuesta entre 100 mil y 200 mil pesos mensuales, pero en ocasiones incrementa por el número de materiales y tipo de cables que se deben reemplazar para garantizar el servicio.

Toda la ciudad, en el propio Centro, hasta en fraccionamientos privados, tenemos este problema. Recientemente en Gran Jardín tuvimos problema de vandalismo. Es en general, pero en su mayoría es en instalaciones subterráneas y en las colonias antiguas de León donde aún existen algunos conductores de cobre", detalló.

El superintendente de la CFE señaló que esta situación de robos provoca un retraso en el restablecimiento del servicio, ya que hasta el momento en que llegan los técnicos se percatan de los elementos faltantes, lo que implica acciones de traslado e instalación.

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Indicó que en León aún existe un 40 % de instalaciones que utilizan el cobre para el servicio eléctrico, mismas que se requieren reemplazar por aluminio trenzado que ayuda a mitigar las fallas.

En primera no se lo roban, y en segunda resiste más a las ramas y árboles, y el cable va forrado", dijo.

Robo de medidores

Medardo Rodríguez puntualizó que en la Zona León se registra un promedio de 400 robos de medidores al mes, pero en ocasiones no solo es el dispositivo, sino también las tapas y las bases.

Se roban el fierro por el costo del material, y los medidores por una mínima parte que tienen de cobre. De 350 a 500 medidores por mes", expresó.

Comentó que cuando los clientes colocan protecciones a sus medidores les ayuda a ellos como CFE para disminuir el número de aparatos que deben reemplazarse y evita que se queden sin servicio.

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Sobre las fallas eléctricas

Rodríguez Morales, especificó que en la zona hay 750 mil clientes, y de León son aproximadamente 550 mil usuarios o servicios activos. Por lo que las fallas de luz se registran en promedio en 250 sectores (áreas que alimenta cada transformador). Pero estas áreas varían, ya que depende de la capacidad de los transformadores que pueden albergar entre 25 a más de 200 usuarios.

Mientras que las atenciones individuales, donde la falla es únicamente en un domicilio, se atiende un promedio de 200 por mes en el área de León.

Expresó que respecto al número de fallas estas pueden variar, ya que se acumulan por los diversos canales con los que cuenta la paraestatal, por lo que a veces un usuario puede hacer el trámite en redes sociales y después por otro medio.

Afirmar un promedio de usuarios es complicadísimo por la variación de los transformadores", dijo.

Señaló que anualmente se reemplazan transformadores de gran capacidad, y se divide el servicio entre dos o tres, esto para evitar que las fallas eléctricas afecten a un gran número de personas.

Respecto al número de aparatos electrodomésticos por los cuales se pide una indemnización, indicó que en la zona León se tiene una o dos solicitudes al mes, las cuales son analizadas por los técnicos para determinar si procede o no.

Esto ya que detectaron diversos errores en las instalaciones eléctricas de los domicilios como el uso de cables de variados calibres (grosor), falta del cable de tierra, o conexiones mal realizadas.

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Piden cuidar distancia con los cables

Medardo Rodríguez Morales, exhortó a las personas que realicen acciones de mantenimiento de las casas, ya sea pintar, construir, colocar herrería, entre otras a mantenerse alejados de los cables eléctricos que pasan frente a unas casas. Lo anterior porque al realizar los trabajos de remodelación no respetan el metro de distancia que debe existir entre una persona y el cable.

Cuando el espacio entre una persona y un cable de energía eléctrica es corto, puede existir el fenómeno de la inducción eléctrica, donde la persona es una carga conectada a la tierra, lo que jala a la energía y provoca la descarga.

Entre más altos están los cables más peligrosos&, llevan más energía", dijo.

DSS

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