Deja Ma. Esperanza González Romero legado de amor
Ma. Esperanza González Romero, fundadora de AM y presidenta de Amexme León, durante el periodo 2011-2013, nos hereda el recuerdo de su profesionalismo y las amistades que sembró a lo largo de toda su vida
Como una persona alegre, amigable, hiper ordenada y metódica, pero sobre todo como una hermana y una tía cariñosa, que aportó su trabajo a la sociedad y a la superación de muchas mujeres, es como será recordada Ma. Esperanza González Romero, quien falleció a los 74 años.
Esperanza González fue la hija mayor del matrimonio integrado por Rafael González Gutiérrez y Esperanza Romero Pérez, nació el 26 de junio de 1950 y tuvo un hermano, Rafael.
Originaria de León, Esperanza realizó la mayoría de sus estudios en el Instituto Jassá, la primaria en el Constancia y Trabajo y una carrera en Trabajo Social, aunque sus actividades profesionales siempre las desarrolló en el área administrativa y en publicidad.
De acuerdo a su hermano, Esperanza trabajó en El Sol de León y posteriormente en el periódico AM, desde su fundación en mayo de 1978.
Esperanza fue un factor fundamental en el éxito de AM, donde colaboró para construir sólidas relaciones con clientes del periódico, y también de Al Día y AM Express.
Enrique Gómez Orozco, presidente del Consejo de Administración de Editorial Martinica y durante casi 44 años director general de AM, aseguró que sin Esperanza González el periódico no hubiera logrado el éxito que ha tenido.
Destacó la calidez y la fineza de su trato, su eficacia en la administración y las ventas, su absoluta honestidad y el compromiso que siempre tuvo con AM.
Y al respecto recordó como una noche incluso ayudó a rescatar las instalaciones del periódico, que se habían inundado y hubo que mover hasta los rollos de papel de la bodega, que estuvieron a punto de echarse a perder.
Por su parte Antonio Lascurain, editor de AM, recordó a Esperanza como pieza clave de una de las grandes épocas del periódico.
“En AM surgieron los suplementos relacionados con las ferias del calzado, Sapica y Anpic, que eran días en que el trabajo se revolucionaba en los últimos años del siglo pasado.
“Llegamos a hacer ediciones de Sapica de treinta y tantas páginas, a mí me tocó colaborar con ella en aquellos días intensos y todos los compañeros apreciamos su liderazgo, firme pero cariñoso, y muy eficaz. Recuerdo una vez cómo le dolió que tuviéramos que cancelar un tiro entero, de 8 o 10 páginas, porque llevábamos ya otras tres secciones y sin remedio íbamos a salir tarde a la calle”, añadió.
Una nueva etapa
Después de su salida del AM, en donde fue directora comercial, continuó en el área de publicidad y junto con Josefina Palomino, quien fue durante muchos años gerente del diario, fundaron la empresa Gazeta, también colaboró para la revista Maxwell.
Rafael agregó que su trabajo la llevó a relacionarse con muchas personas y asociaciones.
“Fue presidenta de AMMJE en el periodo 2011-2013, le gustaba mucho trabajar y socializar, tenía varios grupos de amigas, con las de primaria se reunía los martes, tenía a sus amigas del Jassá, y los jueves se iba con las de Trabajo Social, con sus amigos de AM y sus amigas de Amexme”, comentó su hermano.
Destacó que Esperanza siempre fue bien recibida en empresas y asociaciones porque era derecha, muy recta y sociabre por su gran calidez.
“Le encantaba viajar, cuando pudo se fue varias veces a Europa, a Japón, hizo varios cruceros, visitó Alaska y muchos estados de México, siempre decía que esos recuerdos era lo único que se iba a llevar”.
Resaltó que como hermana fue grande.
“Siempre vio por mi bien, no solo por el mío, también por sus sobrinos, fue una excelente tía, cariñosa, en algunas ocasiones tenían diferencias porque ella fue educada a la antigua, pero siempre los apoyó en cualquier necesidad, hasta sus últimos días, cuando eran chicos los llevaba de viaje”.
Rafael resaltó que la muerte de su hermana fue inesperada y dolorosa para la familia.
“Estaba enferma, pero no de gravedad, falleció de un infarto el 25 de septiembre, decidimos estar con ella en familia y el lunes la despedimos con una misa de cenizas a la que llegaron muchas de sus amistades, fue una demostración de lo que ella sembró durante su paso por esta vida”.
Agregó que está muy agradecido con todos los amigos de ella por su apoyo.
A Esperanza le sobrevive su hermano Rafael y sus sobrinos: Rafael, Alejandro y Andrés González Pons, su sobrina nuera Montse Castillo y sus sobrinos nietos Gala y Mariano González Castillo.
“El legado que nos deja es su rectitud, su apego a Dios y su amor al trabajo, siempre la recordaremos como una persona amigable, sociable, que apoyaba y su hermandad”, concluyó Rafael González Romero.
Testimonios
Esperanza como amiga fue muy querida y apreciada porque siempre fue accesible en su trato y abierta a escuchar a cualquier persona.
Rafael González Romero, Hermano
“Tu muerte fue inesperada y muy dolorosa para la familia, el lunes 30 de septiembre hicimos la misa para depositar tus cenizas, ese momento fue una demostración de lo que fuiste, llegaron muchas de las amistades que sembraste en tu paso por la vida. Te celebro y te quiero, descansa en paz. Gracias por todos los bellos momentos que vivimos juntos”.
Cecilia Ovalle Ríos, Ex presidenta de Amexme
“Conocí a Esperanza en Amexme hace 18 años, la recuerdo como una mujer alegre, culta, perfecta al escribir y buena para capacitar. Nos ayudó a hacer el libro ‘Sin Miedo al éxito’, es su legado, ella conocía nuestros anhelos y logros. La recordaré como una mujer sensible y de buen gusto, mi esposo y yo siempre estaremos agradecidos de haber contado con su amistad”.
Luz Graciela Rodríguez, Ex presidenta de Amexme
“Fue una amiga que se convirtió en hermana, me deja un legado de conocimiento, lealtad hacia las personas, de cultura y de historia, sabía mucho. Siempre tenía el consejo adecuado para quien lo necesitara, fue una mujer de mucho respeto, una de esas amigas que dejan una gran huella, una verdadera amiga que te ofrecía su amistad sincera”.
Marisol Ruenes, Ex presidenta de Amexme
“Fue una persona a la que siempre vi con respeto, también me llegó a jalar orejas, era una persona transparente, de ideas firmes y contundentes que fortaleció no solo a la institución sino a mi persona. Me deja el legado de mujer inspiradora, de una guerrera que no le tenía miedo a nada, ni a nadie, siempre sacó la casta y fue hacia adelante”.
Ana Coco Carpio, Ex presidenta de Amexme
“Fue una gran compañera, durante su gestión siguió la esencia de Amexme de formar mujeres y sembrar en ellas el gusto por el estudio, la actualización y la profesionalización de sus empresas, ella trabajó por ello, ahí encontró lo que encontramos todas, vocación y desarrollo profesional, a cada una nos daba una frase de motivación para seguir trabajando de manera impecable como ella trabajó. Siempre la llevaré en mi corazón”.
Helen Anaya, Ex presidenta de Amexme
“Esperanza fue una amiga entrañable y solidaria, una mujer ejemplar y trabajadora y una compañera leal y comprometida”.
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