Buscar

Vota para que vuelvas a votar

Hay dos razones para votar. La primera y evidente: apoyar al partido y al candidato de nuestra preferencia. La segunda, menos presente en nuestra decisión pero común a todos los electores, votar para que la democracia prevalezca ante cualquier intento autocrático de eliminarla.

Escrito en Opinión el
Vota para que vuelvas a votar

Hay dos razones para votar. La primera y evidente: apoyar al partido y al candidato de nuestra preferencia. La segunda, menos presente en nuestra decisión pero común a todos los electores, votar para que la democracia prevalezca ante cualquier intento autocrático de eliminarla. 

Por eso es indispensable votar. En ese simple acto cívico afirmamos nuestra común creencia, la raíz de todo lo que sostiene nuestra convivencia social. La abstención bajo ninguna circunstancia es útil. Cuando votamos abrimos camino a la próxima elección. 

En los últimos días hemos visto una euforia colectiva por la participación. Surgen campañas ciudadanas en las redes. Con memes y arengas antes desconocidas en nuestro lenguaje formal nos invitan a votar y a "encadenar" los exhortos de 5 en 5 o 10 en 10. Una cadena de oraciones cívicas que traerán bendiciones a todos, una cadena que, de no replicarse, podría traer desgracias al país. 

La oposición y sus alianzas aseguran que es la última oportunidad de frenar el intento autocrático, socialista y hasta comunista del partido en el poder. En posturas más razonadas, sólo el voto masivo salvará a las instituciones que desean fastidiar personajes impresentables como el senador Félix Salgado Macedonio. Decimos que el INE está en juego, que el Banco de México peligra y todo lo que hemos construido durante las últimas tres décadas podría terminar mal. . 

Asumir que una votación copiosa de más de 60% de los electores pudiera favorecer a la oposición es una simple intuición. Las encuestas no muestran la intención de un cuarto de los ciudadanos en edad de votar, por tanto, hay un alto grado de incertidumbre. La esperanza de que se repita la sorpresa que tuvimos en Hidalgo y Coahuila el año pasado  motiva a la oposición. La consistencia en la popularidad de López Obrador tiene confiados a los líderes de Morena, empezando por el propio Presidente que no ha dejado de estar en campaña desde 2018. 

Una alta participación también ayuda a las generaciones futuras. Tenemos que confiar en nuestras instituciones y modernizarlas. El voto electrónico ahorraría mucho tiempo y dinero, las campañas abreviadas también. Ante el acoso del partido en el poder al INE, la mejor manera de apoyarlo es con nuestro voto. 

Una de las virtudes de la democracia es la igualdad. No hay distinciones. Lo mismo vale el voto del Presidente que de un joven estudiante de preparatoria o el del más acaudalado empresario y el de un jornalero. Mucho se discute desde la antigua Grecia ese modelo. La democracia es de todos. 

Hay dos fuerzas y dos geografías marcadas en la elección, la de quienes apoyan ciegamente a Morena y su líder, desde el sur; la del norte productivo que aspira a parecerse más al modelo norteamericano social y económico con el que tienen contacto. En medio hay una mezcla donde se funden las dos visiones. 

Estas elecciones, las más grandes de nuestra historia, están bajo acecho. El crimen organizado quiere decidir en amplias zonas del país, incluso en Guanajuato, donde fuimos ejemplo de paz y pulcritud electoral hace 26 años. El otro acoso viene desde Palacio Nacional, con la descalificación continua del INE y sus miembros. Eso nunca lo habíamos vivido. El desprecio de los órganos ciudadanos siembra tormentas para después de la elección, donde los resultados cerrados serán negados y litigados, arguyendo fraudes inexistentes. 

Por todo y con todo, debemos ir a votar y animar a cuantos conocemos y tratamos de que hagan lo propio. Votar para que nuevas generaciones puedan votar. No hay de otra.

Escrito en Opinión el

Opinión en tu buzón

Deja tu correo y recibe gratis las columnas editoriales de AM, de lunes a domingo

Opini�n