Hace 22 años un organismo gubernamental mundial en salud (OMS ), un centro internacional de investigaciones sobre el Cáncer y la unión internacional contra el cáncer (UICC) que es un organismo de la sociedad civil establecieron rememorar (que no celebrar) con el Día Mundial contra el Cáncer cuyo lema y llamado a la acción este año es "Por unos Cuidados más Justos".

El objetivo de rememorar cada año la lucha contra el cáncer es aumentar la concientización y movilizar a la sociedad para avanzar en la prevención y control de esta enfermedad que en nuestro país según el INEGI y Salud presenta 190 mil casos nuevos y 83 mil defunciones por año.

En comunión con Mayra Galindo, presidenta de la Asociación Mexicana de la Lucha contra el Cáncer y Kenji López presidente de Cancer Warriors y representante de la UICC en latinoamérica, decidimos solicitar a la Comisión de Salud fuera iluminado el frontispicio del Palacio Legislativo de San Lázaro como una señal para que los representantes populares visibilizaran el tema y se sumaran a la lucha.

En la sesión del pleno los diferentes grupos parlamentarios posicionaron por cinco minutos en una sección denominada "efemérides", sin embargo, salvo pequeños destellos, en los discursos emitidos señalaron algunos datos y cifras de "preocupación" por el grave problema que esta enfermedad significa, otros dando recetas de cómo prevenirlo o tratarlo, y dos solo compromisos "genéricos" `para decir lo que no se hace y hacer lo que no se dice.

Tanto en el pleno como en la ceremonia previa a la iluminación, señale que debiésemos tener como meta el impulsar la correcta y debida instrumentación de los planes, leyes y reglamentos vinculados al control del cáncer, así como la evaluación y actualización de los mismos. Presenté un documento con seis ideas acción que por dignidad los legisladores debiéramos hacer ya y evitar más sufrimiento y dolor a las familias mexicanas.

El término cáncer estimados lectores es un común denominador de diversas enfermedades que reflejan la pérdida del equilibrio de reproducción de las células en el organismo, y que varía el tipo según el sexo y la edad. Los más reconocidos son el cérvico uterino, mama, próstata, tiroides, leucemias y linfomas, hueso, estómago, colon, ovario, pulmón, hígado y cerebro.

Les propuse como la primera acción resucitar al Registro Nacional del Cáncer, instrumento vigente en nuestra Ley General de Salud desde el 22 de junio de 2017, desaparecido en marzo del 2021 por el ejecutivo federal. Con ello lograríamos orientar políticas públicas en prevención, detección temprana y tratamiento; analizar la capacidad hospitalaria instalada; planear y garantizar la suficiencia de recursos humanos y; planear y asignar recursos financieros.

La segunda fue hacer efectiva la Ley General para la Detección Oportuna del Cáncer en la Infancia y la Adolescencia publicada vigente desde el 7 de enero de 2021. Con ello lograríamos la atención integral y universal de las niñas, niños y adolescentes menores de 18 años con sospecha o diagnóstico de cáncer; la capacitación continua al personal de salud; disminuir el abandono al tratamiento y asegurar el abasto de medicamentos. Debemos exigir que se emitan las guías de atención de la enfermedad, y la operación de la Red de Apoyo contra el Cáncer de la Infancia y la adolescencia que llevan ya siete meses de retraso según los plazos otorgados en el transitorio de la Ley.

La tercera es evitar se eliminen del Instituto Nacional de Cancerología el Programa Micaela de combate al Cáncer Cérvico uterino y otros programas que atienden cánceres específicos como el cáncer de pulmón en mujeres y muchos otros programas que están desapareciendo en esta administración.

La cuarta es auditar al INSABI para conocer los parámetros utilizados -recursos incluidos- para atender los pacientes de cáncer, al menos los tumores que amparaba el fondo de gastos catastróficos y ahora el fondo de salud para el bienestar.

La quinta es hacer un estudio de las causas de la mortalidad en exceso y conocer a detalle las razones de las defunciones por estratos de edad y tipos de cáncer. Buscando si fueron fallas de la reconversión, falta de atención o medicamentos u otras razones. Las autopsias verbales puede ser una buena metodología.

Concluí haciendo un llamado al Ejecutivo Federal para que se vacunen de inmediato todos los niños de 5 años y más, así como los adultos que padezcan estas neoplasias y no tengan contraindicación para su aplicación. Vayamos por unos cuidados más justos.