La juventud de Brasil manifestó ayer su apoyo “irrestricto” a la presidenta Dilma Rousseff para impedir un “golpe de Estado” con el juicio político que se fragua en su contra.
Durante el día, los brasileños salieron a las calles de al menos 30 ciudades en defensa de Rousseff. Según un balance de la Central Única de Trabajadores (CUT), marchas y protestas acontecían en ciudades de Sao Paulo, Bahía, Ceará, Goiás, Mato Grosso, Minas Gerais y Pernambuco.
“La fuerza y la belleza de esta plataforma es juventud”, dijo Rousseff durante la Tercera Conferencia Nacional de Jóvenes Brasileños. Agregó que “aquí están los colores de la diversidad brasileña”.