Salvatierra, Guanajuato.- Javier Barajas Piña buscó a su hermana, la maestra Lupita, hasta que encontró sus restos en las fosas de Salvatierra.El sábado en la noche le tocó a él y fue asesinado de 15 disparos, también en Salvatierra.
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La desaparición en febrero del año pasado de su hermana, la maestra Guadalupe Barajas Piña, llevó a Javier a sumarse a los colectivos que buscan a sus parientes.
Lupita fue una de las personas identificadas entre los 79 cuerpos rescatados de las 65 fosas del Barrio de San Juan, en el mismo municipio.
Más tarde, el abogado de 27 años se integró al equipo de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas, donde los demás familiares de desaparecidos lo veían como un aliado y no como un funcionario.
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“En su trabajo era una persona bien entregada, y con su trabajo siempre destacó, la verdad era bien dedicado y entregado, él venía de ser víctima y precisamente por el tema de su hermana, y pues se sumó con nosotros, y la verdad es que siempre pues dispuesto a trabajar y apoyar”, dijo el titular de la Comisión Estatal, Héctor Díaz Esquerra.
Es una pérdida muy fuerte para todos nosotros, y para todo el equipo porque prácticamente nos convertimos en una familia, y pues la verdad nos pega mucho”, añadió el funcionario.
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La manera en la que mataron a Javier impresionó a los colectivos de familiares de personas desaparecidas, quienes por temor no pudieron acudir a su velorio en Salvatierra.
Vecinos de la calle Abasolo, en el centro de Salvatierra, escucharon detonaciones de arma de fuego el sábado, alrededor de las 10:30 de la noche y al salir a la calle vieron a un hombre lesionado sobre la banqueta, por lo que solicitaron una ambulancia.
Pero no había nada que hacer, Javier recibió al menos 15 impactos.
Integrantes de tres colectivos, que pidieron no revelar sus nombres, exigieron entre lágrimas justicia para Javier y su hermana.
“Yo hablé con él hace unos días, y le hice una pregunta muy fuerte, le dije, Javier, ¿qué es peor, haber encontrado a tu hermana como la encontraste, o no saber dónde estaba?, y él me dijo que por lo menos ya tenía dónde llorarle a su hermana”, contó una de las integrantes de los colectivos.
¿Cómo podemos vivir en un Estado donde primero te desaparecen a un familiar y luego, por buscarlo, te pueden matar de esa manera? ¿Qué está haciendo la autoridad?”, cuestionó otra.
Un familiar de otra persona desaparecida pidió a las autoridades que eviten más tragedias como ésta.
“Que las autoridades prevean la seguridad de las víctimas en el estado y de su propia Comisión de Búsqueda, que la seguridad no es un juego, pues las madres y todas aquellas personas que salimos a buscar a diario sabemos el riesgo que corremos y que sabemos que a lo mejor no vamos a regresar a casa”.
Preocupa a colectivos asesinato de integrante de la comisión
Tras el asesinato de Javier Barajas Piña, quien era miembro de la Comisión Estatal de Personas Desaparecidas y quien estaba inscrito en el área de búsqueda en campo, una de las voceras del colectivo “Hasta Encontrarte” comentó que este hecho preocupa a quienes realizan las búsquedas.
Javi no era solo un trabajador de la Comisión, también era una víctima, era nuestro compañero del mismo dolor”, comentó.
Dijo que lamentan el asesinato del integrante de la Comisión y esperan que se haga justicia para Javier, así como también que las autoridades vean por la seguridad de los familiares de desaparecidos.
“Que las autoridades prevean la seguridad de las víctimas en el estado y de su propia Comisión de Búsqueda, que la seguridad no es un juego, pues las madres y todas aquellas personas que salimos a buscar a diario sabemos el riesgo que corremos y que sabemos que a lo mejor no vamos a regresar a casa”, aseveró.
Señaló que la Fiscalía General del Estado (FGE) debe tomar cartas en el asunto para que se esclarezca el hecho.
Asimismo, mencionó que el hecho preocupa a quienes salen a buscar familiares.
“Creo que todos los colectivos estamos muy preocupados e impresionados de lo que está pasando, de lo que pasó, vemos que nos puede pasar a cualquier hora, en cualquier momento; es un tema de preocupación que esperemos que las autoridades nos den respuesta de lo que pasó”, concluyó.
Encuentran restos de su hermana
A 10 días de cumplirse un año de la desaparición de la maestra Lupita Barajas Piña, el 19 de febrero pasado, se informó que sus restos fueron encontrados en una fosa clandestina en la comunidad Rancho Nuevo, en el municipio de Salvatierra.
Familiares e integrantes de la agrupación “Mariposas”, que se dedica a buscar a víctimas de desaparición, confirmaron la identificación de los restos mediante los resultados de las pruebas genéticas.
Guadalupe Barajas Piña desapareció el sábado 29 de febrero de 2020; había salido de su casa para comprar el almuerzo en la zona centro de Salvatierra, pero no regresó.
Sus papás informaron entonces que hablaron con ella por teléfono alrededor de las 10 de la mañana de ese día y nunca más supieron de ella.
La maestra Lupita tenía 32 años, trabajaba en la primaria Guadalupe Victoria de la comunidad Valencianita, en el municipio de Irapuato, donde radicaba; los fines de semana iba a visitar a sus papás en Salvatierra.
El 28 de octubre del año pasado Karla Quintana, comisionada nacional de Búsqueda de Personas de México, en rueda de prensa informó el hallazgo de una fosas clandestinas en ese mismo municipio, atrás del Rastro Municipal.
Allí fueron localizados restos de 79 personas, entre ellos el de la maestra Lupita; otras seis víctimas también han sido identificadas.
El colectivo “Mariposas”, a nombre de la familia de la víctima, agradeció las muestras de solidaridad.
MCMH
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