Gracias a una orden de cateo, la agrupación animalista Prodebida Hidalgo logró rescatar a cuatro perros en situación de maltrato, que estaban en un predio de Mixquiahuala, y fueron consignados a la unidad de control canino municipal.

Sin embrago, los activistas acusan desinterés y negligencia en dicha unidad, ya que dos de los canes rescatados fallecieron ya y hasta el momento no se les han revelado las causas de sus decesos, acusaron los defensores de animales.

En días pasados la organización Prodebida Hidalgo, dedicada al cuidado y rescate animal en la región de Mixquiahuala, se percató del mal estado físico de cuatro perros en un predio en ese municipio, atrás de los campos llamados "Gálvez".

Derivado de la denuncia interpuesta el pasado 15 de febrero ante el Ministerio Público, se logró que el juez ordenara un cateo a la propiedad para rescatar a los canes y posteriormente consignarlos a la unidad de control canino, dijeron.

No obstante, ha pasado casi un mes desde el rescate y los animalistas no han recibido información sobre el estado de los perros, únicamente se les notificó que dos perdieron la vida, pero sin detallar las causas ni qué animales murieron.

Según el material gráfico proporcionado por Prodebida, tres de los perros se encontraron en mal estado de salud, "casi en los huesos" relató un integrante de la organización, mientras que otro de los animales lucía en buenas condiciones.

Lo anterior hizo suponer que ese perro apenas había sido recibido por el propietario del inmueble, quien presuntamente responde al nombre de Carlos Viveros, señalaron los integrantes de la agrupación animalista regional.

El predio se observa como un terreno grande, lleno de chatarra, basura y maleza. Entre un sinfín de objetos oxidados se encontraron amarrados a los cuatro perros, uno estuvo bajo los rayos del sol y los otros tres atados a unos postes.

PIDE RESGUARDAR A LOS CANES

Al no recibir notificaciones por parte de la unidad de control canino, la organización busca el resguardo de los dos perros que aún sobreviven, ya que temen que no reciban un tratamiento adecuado y tengan el mismo destino de los ya fallecidos.

"Por varios días, inclusive semanas, no hemos recibido respuesta del ministerio público, hasta hoy que ingresamos un oficio para que se nos dé el resguardo de los caninos y proporcionarles una mejor calidad de vida", puntualizaron.

A pesar de estar en resguardo, los animalistas aseguran que ellos han tenido que llevar costales de alimento para los perros, por lo que piden tenerlos bajo su protección, situación que esperan se resuelva a la brevedad posible.