Guanajuato, Guanajuato.- La Asociación Manos Unidas de Guanajuato llevó a cabo una merecido reconocimiento al músico Manuel Amezquita Huerta, al fundador del Teatro Batracio Juan José Padro Viramontes y al Grupo 7 Scouts Guanajuato por su compromiso con la juventud.
Hoy celebramos vidas que han marcado la historia cotidiana de Guanajuato. Personas y agrupaciones que, con su hacer diario, han tejido identidad, cultura, valores y comunidad. A nombre de Manos Unidas de Guanajuato, gracias por demostrar que una ciudad se construye con talento, con pasión, con servicio, pero sobre todo con amor. Gracias por recordarnos que sí es posible transformar realidades desde el arte, la educación, la cultura y la acción social”, dijo Verónica Chacón de Manos Unidas.
Como cada año, Manos Unidas rinde homenaje a guanajuatenses que se han dado a la tarea de mejorar la ciudad con sus contribuciones a la cultura, las artes, el deporte, el trabajo social, entre otros ámbitos, en esta ocasión la ceremonia fue muy emotiva para el Grupo 7 Scouts Guanajuato que estuvo en la lista de homenajeados.
Y es que en el 2026 los Scouts cumplen 100 años de haber sido reconocidos en México, la organización comenzó sus actividades en 1920. Pero fue seis años después que fue avalada por el grupo internacional.
El Grupo 7 Scouts Guanajuato recibió el reconocimiento por su labor con la niñez y la juventud, por la formación de valores, respeto por la naturaleza y compromiso con las causas sociales.
La asociación también entregó reconocimientos a dos destacados personajes de la vida cultural de Guanajuato, al músico Manuel Amézquita Huerta director de la Estudiantina Guanajuato la cual incluso llegó a tocar en el Vaticano para el papa Francisco. En la ceremonia la tuna estrenó la canción “Rinconcito de América”.
El otro fue para Juan José Prado Viramontes, fundador de Teatro Batracio, Los Juglares médicos de la risa y el Festival Medieval. Dramaturgo que ha destacado por su creatividad y pasión por la comedia.
Su trabajo ha permitido que el teatro se convierta en un punto de encuentro para nuestra comunidad, con obras y eventos que ya son parte de la memoria colectiva de Guanajuato, como Don Juan Jolgorio, el Festival Medieval y muchas otras expresiones artísticas que han despertado en generaciones enteras el amor por las tablas, la imaginación y la cultura viva”, comentó Chacón.
LF
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