Alejandra Ayala despierta del coma y dice el nombre de su mamá
Ale Ayala lucha por su vida tras ser noqueada en Escocia
Alejandra Ayala despertó del coma inducido tras someterse a dos cirugías en el cerebro, y la respuesta hasta el momento ha sido favorable.
La peleadora mexicana de 33 años fue noqueada el pasado 13 de mayo en Escocia, y tuvo que ser intervenida de emergencia horas después.
"Ya despertó. Vamos por buen camino", confirmó Alejandro "Terra" García, ex campeón del mundo y actual presidente de la Comisión de Boxeo y Artes Marciales.
La "Fénix" tiene una marca profesional de 14-6, 8 KO's, y debutó en el profesional en junio de 2015.
Ale Ayala despertó
En tanto, una fuente cercana a la familia confirmó que la boxeadora ya tuvo movilidad de extremidades y hasta habría mencionado el nombre de su madre.
Sus padres están con Alejandra en Glasgow. Llegaron un par de días antes del combate y han estado vigilando su recuperación.
"Le quitaron los medicamentos y está reaccionando bien, mencionó el nombre de su mamá, movió piernas y manos", informó una fuente cercana a la familia.
El KO que sufrió Alejandra Ayala en Escocia
Alejandra Ayala peleó con la escocesa Hannah Rankin el viernes 13 de mayo en Glasgow. Tras resistir demasiado castigo en los últimos dos episodios, fue noqueada en el round 10.
A partir del round siete, Hannah Rankin ligó combinaciones y golpeó sin freno a Ayala, originaria de Tijuana y quien fue apoyada por su equipo desde la esquina y por sus padres.
Ya en el cierre del noveno round, el penúltimo de los pactados, Alejandra se notaba golpeada, manteniéndose en pie casi sin tirar golpes.
"¡Tira golpes, tira combinaciones en medio", se escuchaba gritar desde la esquina de la mexicana.
El último round fue un monólogo de Hannah Rankin. La escocesa ligó combinaciones a la cabeza y al cuerpo. Alejandra Ayala se mantuvo en pie apenas con la guardia arriba. Incluso el réferi le pidió tirar algún golpe y desde la esquina era evidente la desesperación por no perder la pelea.
Cuando Hannah Rankin conectó la última combinación y la golpeó repetidamente en la cabeza, el réferi detuvo el combate. La mexicana no protestó, al contrario, pareció abrazar al árbitro.