Descripción general:
Previo al ingreso al Salón de la Fama, Milton Queiroz ‘Tita’ recuerda el impacto que tuvo con León y el momento que marcó su carrera.
Milton Queiroz da Paixao (Río de Janeiro, 67 años) es “inmortal” para la afición del Club León desde 1992, pero este martes su entrada a la eternidad será oficial.
Tita, el máximo ídolo en la historia del Club León, será uno de los nuevos miembros del Salón de la Fama del Futbol Internacional, en una ceremonia que vuelve a Pachuca y en la que la Fiera tendrá doble protagonismo, pues Ignacio Ambriz, actual entrenador esmeralda, también será investido.
Desde su habitación de hotel en Pachuca, en las horas previas a la ceremonia, Tita dedica unos minutos para recordar lo inolvidable. Aquellas temporadas con León, sus goles, títulos y la conexión con la afición que hoy, a 35 años de su llegada, aún lo detiene en la calle para pedirle un autógrafo o sacarle una sonrisa, como las miles que él generó desde la cancha del Nou Camp.
¿Cómo tomas este ingreso al Salón de la Fama?
Con mucho cariño y agradecimiento por el honor. Un llamado al Salón de la Fama no es sólo por lo que hice con León, sino que es algo mundial, así es que es un honor enorme.
Obviamente el mayor impacto en México lo tuviste con León, más allá de que venías de ser mundialista en Italia 1990…
Claro que el peso más grande para mi carrera es por haber vestido la playera verdiblanca, por ser campeón, por ser el tercer máximo goleador en la historia del club y más allá de eso, siempre estaré agradecido por el cariño de la ciudad, de la afición, porque la ciudad se volvía loca por el equipo en aquellos años. Fue algo increíble.
Cuando llegaste a México en 1990, ¿pensaste que esta historia sería así, que tomarías un segundo aire en tu carrera de esa forma?
La verdad es que no fue un segundo aire, porque yo venía del Mundial, fue un momento en el que yo todavía tenía mucho futbol y ganas de trascender, de jugar. Si yo pensara en sólo venir al León para cumplir y retirarme, pues me hubiera ido a Brasil, pero para mí, venir al León fue una invitación para seguir dando lo mejor de mí y cuando la gente del León fue a Brasil para invitarme, no lo dudé un segundo. Yo sabía que iba a tener éxito en el futbol mexicano.
Repasando tu carrera de 20 años como futbolista profesional (debutó en 1977 con Flamengo y se retiró en 1997 con Comunicaciones), ¿cuáles son los momentos que pondrías en la galería de un Salón de la Fama?
No tengo duda que mi momento de oro fue que, después de 29 años, el Club León ganara el título nacional. Fue algo mágico para mí, para mis compañeros, para el equipo… La ciudad se volvió una locura.
Hay que recordar que León ya era un equipo tradicional, que había tenido grandes equipos en los años 40 y 50, con varios títulos, pero habían pasado 29 años sin ganar en Primera División y coronarnos en 1992 sin duda es el punto número uno de mi carrera.
La gente sigue hablando de esos momentos únicos y es un placer saber que yo pude participar jugando, aportando goles en la Liguilla… ¿Cuántos refuerzos llegan a México y no tienen la oportunidad de ser campeones? Yo pude hacerlo y eso me marcó para siempre.
Y además dejaste muchos recuerdos, goles y jugadas que la afición sigue recordando con alegría…
Tuve la fortuna de marcar goles, que es algo que siempre queda ahí, porque los delanteros, los que atacamos, somos quienes decidimos los partidos, así que la gente se acuerda de nosotros. Te puedo decir que cada día que estuve con León, desde que llegué, fue algo mágico.
¿Hoy cómo ves al León? Acaban de cerrar su peor torneo en este siglo y hay molestia entre la afición…
León se ha metido entre los cinco equipos más importantes del futbol mexicano, por su historia, sus títulos y afición y siempre hay obligación.
Me hubiera gustado ir al último juego, contra Puebla, pero vi que incluso con el equipo en los últimos lugares y ya no peleando nada en el torneo, la afición llenó el estadio y eso es impresionante. Eso habla de que la gente está ahí siempre, respaldando a su equipo y se merecen que el club esté peleando siempre arriba, aunque en el futbol hay altas y bajas y así hay que entenderlo.
Estoy seguro de que la directiva tomará las decisiones para reparar al equipo y que Nacho (Ambriz) tendrá tiempo para una buena preparación, para que el próximo año estén otra vez arriba. Entiendo que la gente está triste y molesta y con razón, pero seguro vendrán cosas mejores, porque la afición siempre quiere estar peleando arriba y ahí es donde debe verse.
Lo que sigue
La ceremonia de ingreso al Salón de la Fama del Futbol Internacional será este martes 11 de noviembre a las 6 de la tarde en el Auditorio Gota de Plata de Pachuca, Hidalgo, con transmisión en vivo a través de FOX Deportes, disponible en Caliente TV.
¡Qué ‘Titazo’! El golazo de Tita a dos porteros.
El último juego de Tita como jugador del Club León.
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