Guanajuato.- La gobernadora Libia Dennise García Muñoz Ledo solicitó al Congreso local que le autorice un endeudamiento de 8 mil millones de pesos para 2026. Esta nueva deuda de Guanajuato se destinará a dos objetivos principales.
La mitad del crédito, 4 mil millones de pesos, será para la construcción del Acueducto Solís-León. Esta obra llevará agua de la Presa Solís a los municipios de León, Silao, Irapuato, Salamanca y Celaya. Su construcción estará a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
La otra mitad, 4 mil millones de pesos, se canalizará a proyectos de inversión pública productiva.
Así lo anunció en la entrega de las iniciativas de Presupuesto de Egresos y Ley de Ingresos del Estado para 2026. El documento lo integran otras leyes que componen el paquete fiscal de Guanajuato, a los diputados locales.
Contratación pese a la falta de proyecto ejecutivo
El financiamiento para el Acueducto Solís-León se solicitará a pesar de que aún no está proyecto ejecutivo que realiza la Comisión Nacional del Agua (Conagua). De hecho, no hay fecha para el arranque de la obra el año próximo.
“Estas definiciones todavía no están establecidas”, reconoció Héctor Salgado Banda, secretario de Finanzas del Estado.
Agregó que tienen planeado lanzar la convocatoria para contratar el endeudamiento en enero, para en marzo o abril contratar el crédito.
Al preguntarle la razón de contratar deuda desde el inicio de año, si aún no hay proyecto respondió: “Consideramos tener ya el dinero y no andar a las carreras con la obra”.
Deuda de Guanajuato superará los 17 mil millones
Con esta nueva deuda, Guanajuato llegará a 17 mil millones de deuda pública directa. Tiene un saldo de 9 mil 312.8 millones de pesos al 31 de octubre pasado, de acuerdo con el Boletín de Deuda Pública Estatal.
Con estos 8 mil millones, el total de la deuda actual prácticamente se iguala a todo lo que el Gobierno estatal ha dispuesto de deudas bancarias desde 2016.
De acuerdo con el Registro Estatal de la Deuda Pública y Obligaciones, se cuenta con 15 créditos vigentes a partir del 4 de agosto de 2016. De estos, se ha dispuesto la cantidad de 17 mil 282 millones de pesos.
Los contratos de apertura de crédito simple están repartidos con seis con BBVA Bancomer, cinco para Banamex, dos con HSBC y uno respectivamente con Banco del Bajío y Santander.
Situación financiera “óptima”
En conferencia de prensa, Salgado Banda dio amplias explicaciones sobre la excelente situación financiera del Estado. Por ello sostuvo que “Guanajuato tiene condiciones óptimas para asumir nuevos créditos destinados a inversión pública productiva, de acuerdo con la Ley de Disciplina Financiera”.
Aseguró que “esta capacidad es resultado de una gestión disciplinada y de un manejo prudente del gasto y de una estabilidad estructural que no pone en riesgo las finanzas estatales”.
El estado tiene una calificación AAA, que es la más alta de dos calificadoras internacionales, lo que lo coloca como uno de los tres mejor evaluados.
Precisó que el estado solicitó a la calificadora Fitch un análisis para ver si con este nivel de deuda se mantendrá esta calificación. La respuesta fue que sí.
El Secretario de Finanzas agregó que este endeudamiento equivale solo al 21% de las participaciones federales que se reciben, muy por debajo de la media nacional que es de 59%.
La deuda percápita de Guanajuato es de apenas 1,572 pesos, una de las más bajas del país, pues hay estados que superan los 4 mil pesos por habitante.
El total de la deuda de Guanajuato representa solo el 0.5% del PIB estatal, muy por debajo de la media nacional que es 0.9%.
Destacó también que con el sistema de subastas inversas con las cuales se han contratado las demás deudas en los años anteriores, Guanajuato ha obtenido condiciones ventajosas, como un interés de 14 puntos, en comparación con otros estados, sin comisiones ni condiciones adicionales.
“Podemos contratar esta deuda sin comprometer nuestra estabilidad ni nuestras calificaciones”, concluyó.
Sobre los proyectos específicos para los cuales será destinada la deuda, comentó que serán dados a conocer luego de ser aprobada por el Congreso y de ser sometidos a la autorización de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
¿Y si el Acueducto Solís-León no se construye?
En las últimas semanas han surgido protestas de habitantes y campesinos de los municipios del sur del Estado, como Acámbaro, Jerécuaro, Salvatierra y Tarimoro, que demandan no construir el Acueducto Solís-León.
Se le preguntó a Héctor Salgado qué pasará si finalmente se decidiera no realizar esta obra.
“Si de aquí a marzo se dice: no hay proyecto, no llevaríamos a cabo la subasta (del crédito)”, indicó.
Pero en caso de que ya se hubiera llevado a cabo la subasta y asignado el crédito a un banco ganador, no se tomaría el dinero.
Pero si la obra ya estuviera en alguna etapa, entonces se tendría que terminar el contrato de manera anticipada y “tendríamos que decir al Congreso: cancélame este decreto”, explicaron Itshel Vega Romero, procuradora fiscal, y Edmundo Soto, subsecretario de Finanzas e inversión.
Aquí el boletín de deuda pública con corte a octubre 2025:
JR
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