Guanajuato, Gto. La Caravana Coca-Cola volvió a generar caos vial en la zona sur de Guanajuato capital la mañana de este miércoles.
Aunque el evento festivo concluyó la noche anterior, sus estragos continuaron horas después para cientos de habitantes, con bloqueos, embudos viales y retrasos generalizados.
A esta situación se suman los llamados a no invertir recursos públicos para eventos que violan la ley, al promover bebidas azucaradas con elementos atractivos para la niñez.
Colapsa tráfico a su partida

Desde temprana hora, automovilistas que se dirigían hacia la zona centro y a las colonias aledañas reportaron tiempos de traslado inusualmente largos.
Alejandra, empleada del Gobierno del Estado, afirmó haber tardado más de 25 minutos tan solo en el tramo que va del último semáforo de la avenida Santa Fe al semáforo de la glorieta de Yerbabuena.
Esta distancia, en un día normal, se recorre en menos de la mitad del tiempo.
Tras el paso de la Caravana Coca Cola
El tránsito lento afectó la avenida Santa Fe, Yerbabuena, Euquerio Guerrero, y también el acceso al Diego Rivera en su sentido a la glorieta Santa Fe. Además, esto empezó a empeorar el tráfico habitual de la zona centro.
En redes sociales, los reclamos se multiplicaron. “La caravana ya se fue, pero el desorden se quedó. Todo está parado y nadie da explicación”, comentó Carlos, conductor que publicó fotografías del congestionamiento frente a la avenida Euquerio Guerrero.

Otra usuaria, Daniela, quien viajaba en transporte público, señaló que el camión avanzó “a vuelta de rueda” durante casi media hora: “Después de la fiesta, los que pagamos somos los que tenemos que llegar a la escuela de los niños y al trabajo”.
En conclusión, vecinos y trabajadores coincidieron en que los bloqueos posteriores a la Caravana Coca Cola resultaron incluso más complicados que los previos al desfile navideño, debido a vallas, vehículos pesados y desvíos.
Por ello, los usuarios exigen a las autoridades municipales una mejor planificación para evitar que eventos masivos conviertan la movilidad cotidiana en un caos.
Crisis a su llegada y parálisis por le noche

La Caravana Coca-Cola en Guanajuato capital generó críticas ciudadanas y afectaciones al tránsito desde la mañana del 9 de diciembre de 2025.
Los vehículos de la caravana se estacionaron en la glorieta de Yerbabuena y Paso del Norte. Redujeron carriles y crearon un cuello de botella en zonas clave de alta afluencia vehicular.
Conductores y usuarios del transporte público reportaron largas demoras, con testimonios de más de quince minutos para avanzar solo dos cuadras en el ruta, lamentando la falta de vías alternas.
La presidenta municipal, Samantha Smith Gutiérrez, había anunciado la Caravana como un espectáculo navideño de música, personajes y sorpresas, destacando el interés de que Guanajuato capital fuera parte de la ruta.
Sin embargo, las quejas se multiplicaron por el cierre de vialidades como la avenida Euquerio Guerrero en hora pico, afectando a la zona sur y a empleados que temían no poder regresar a sus casas tras concluir el show. La Dirección de Movilidad confirmó desvíos en rutas de transporte.
En contraste, el evento resultó en un éxito de asistencia, con cerca de 50 mil personas que disfrutaron el recorrido de 2.5 kilómetros por el bulevar Euquerio Guerrero, vitoreando a los carros alegóricos y a los personajes navideños.
No obstante, el evento fue rechazado por Poder del Consumidor, que argumentó una violación al artículo 24 Bis del Reglamento de la Ley General de Salud en Publicidad, por el uso de elementos atractivos para niños en la promoción de productos no saludables.
JB