Frenados

 

Ánimo que ya es lunes. Nuevamente la armadora General Motors tendrá que frenar sus líneas de producción a consecuencia del desabasto de semiconductores.

Quien pensaría que una pequeña pieza se iba a convertir en un gran problema mundial derivado de la sobredemanda del insumo en diversos sectores y el cierre de plantas productoras en países asiáticos, en donde se concentran 8 de los 10 más importantes compañías especializadas en chips.

La factoría de San Luis Potosí inició el paro técnico de producción desde el pasado 20 de septiembre y esperan se reanude hasta el 4 de octubre.

Sin embargo, unos días después ya tienen considerado un segundo "frenón" que será el 11 y el 18 de octubre.

Otra factoría de GM que sufrirá del mismo mal es la de Ramos Arizpe, en Coahuila, en donde se produce la Chevrolet Blazer, el paro comienza hoy y termina el 4 de octubre y las líneas de ensamble que están dedicadas al modelo Equinox será del 11 al 18 de octubre.

En el caso de la planta de Silao, Guanajuato no tienen programada pausa en lo que resta del mes, hay que recordar que del 6 al 13 de septiembre fue el más reciente paro, su cuarto en lo que va del 2021.

 

Bajón

 

Derivado del mismo problema es que este año estiman que se fabriquen 5 millones de vehículos menos que los producidos el año pasado.

La baja del 6.2 por ciento fue una estimación de la consultora IHS Markit, su proyección es que en este año se produzcan 75.8 millones de vehículos a nivel internacional.

La firma consultora hizo un cambio recientemente en su proyección sobre el desempeño de la industria automotriz porque los ajustes en las diversas armadoras han estado a la orden del día.

Tan sólo pusieron en la mesa el caso de Toyota que para el próximo mes tendrá una baja en su fabricación de unidades, tema que llama la atención, considerando que era una de las pocas compañías que no había tenido antecedente de pausa por el desabasto de chips.

Hablando en particular de México la proyección es que se lleguen a fabricar 3 millones 40 mil vehículos cifra que no permitirá llegar al aumento del 12 por ciento previsto por la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

 

Ni hablar

 

Y los daños, sin duda que han sido mucho y con la posibilidad de que esto se alargue hasta el siguiente año aún serán más.

Alix Partners, consultora especializada en el automotriz haciendo números ha compartido que el desabasto de microchips le costará al automotriz 210 mil millones de dólares.

Sabe que lo más preocupante para el automotriz-autopartes del que en Guanajuato dependen por lo menos 100 mil personas de forma directa, es que el desabasto de chips, es solamente uno de los problemas.

Porque también hay que considerar la escasez existente en todos los insumos procedentes de los petroquímicos y los problemas de logística que han causado un incremento de hasta el 50 por ciento en el costo de envíos de importación.