MUY SORPRENDIDOS quedaron muchos de los panistas que escucharon el discurso de su dirigente, Jorge Romero, en la Asamblea Nacional de su partido celebrada ayer.
Y ES QUE en ningún momento de los 45 minutos que duró su intervención tocó el tema de la remoción del ahora exfiscal, Alejandro Gertz, quien ya se enfila como embajador en “un país amigo”.
LA EXPECTATIVA era que Romero aprovechara el foro para lanzar una fuerte crítica sobre la forma y el fondo de ese movimiento y también sobre la llegada por la puerta de atrás de la ex consejera jurídica Ernestina Godoy… pero eso no ocurrió.
¿A POCO el PAN ya dio por perdida la batalla por la autonomía de la FGR? Es pregunta.
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QUE NADIE se sorprenda si algunos diputados morenistas que andaban muy engallados la semana pasada acaban escondiéndose de su coordinador, Ricardo Monreal.
CUANDO el zacatecano abrió la puerta a los ajustes a las reformas a la Ley de Aguas para respetar los derechos de sucesión de los agricultores, hubo quienes lo acusaron de traidor por querer modificar la iniciativa.
PERO ahora que las organizaciones campesinas levantaron los bloqueos carreteros tras acordar con el gobierno justamente lo que Monreal sugirió, quienes quedaron mal parados fueron aquellos que defendían a ultranza, y sin argumentos, una propuesta que terminó en el bote de la basura.
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A PROPÓSITO de las protestas de agricultores que anduvieron cerrando carreteras, vaya pleitazo el que se traen la gobernadora de Chihuahua, la panista Maru Campos, y la senadora morenista Andrea Chávez.
MIENTRAS la mandataria estatal alienta a un grupo que la apoya políticamente, la legisladora empuja a otro y hasta hizo desfiguros en el Senado con un sainete en la comparecencia de la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel.
RESULTA que la cuatroteísta metió a un grupo de productores chihuahuenses al salón de plenos a pesar de que los morenistas tienen prohibido el acceso a cualquiera que proteste contra el gobierno.
PERO, con eso de que Chávez es pre-pre-candidata a la gubernatura de Chihuahua, parte el queso con el cuchillo grande en la Cámara alta, y no desaprovecha la oportunidad de jalar reflectores sin importarle las reglas de su bancada ni atacar a sus propios correligionarios, como Montiel.
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AHORA que Juan Ramón de la Fuente salió de circulación por una operación en la espalda, hay quienes se preguntan si el subsecretario Roberto Velasco, quien se quedó al frente de la SRE como encargado de despacho, no terminará haciendo una “Maniobra Godoy” en la que su interinato se convierta en algo definitivo.
POR LO PRONTO, toca desearle lo mejor al canciller y esperar que Velasco tenga un buen desempeño en tiempos cruciales en la relación con Donald Trump.
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