Guanajuato.- El aumento de 508 pesos, equivalente al 76 % en el costo del refrendo de placas vehiculares para 2026, busca fortalecer los impuestos estatales en Guanajuato. La justificación es que el Estado cobra mucho menos que otros 23 estados del país.
Y por lo tanto se busca igualarse con la media nacional que son 1,179.94 pesos. En Guanajuato se cobrarán 1,180 pesos.
Así lo informó Edmundo Soto Torres, subsecretario de Finanzas e Inversión de la Secretaría de Finanzas del Estado en entrevista con AM, quien agregó que con este incremento también se pretende fortalecer los ingresos propios de la entidad, que es una estrategia del Gobierno del Estado.
Con el incremento, Guanajuato será uno de los tres estados que ocuparán el sexto lugar de cobros más altos del refrendo en el país.
El martes, AM dio a conocer que a partir del 1 de enero, aumentará a 1,180 pesos el refrendo vehicular, es decir, 508 pesos más de lo que se paga ahora: 672 pesos a vehículos de motor, remolques y semi-remolques.
Y para motocicletas, bicimotos y vehículos similares, la tarifa que hoy es de 165 pesos, aumentará a 200 pesos, esto es, 35 pesos más.
El refrendo busca recaudar 530 millones de pesos más
Entrevistado este miércoles al respecto, el funcionario informó que con este aumento se busca recaudar 530 millones de pesos más por refrendo el año próximo.
Entre los argumentos con los que justificó el incremento, destacó que hicieron un análisis de lo que cobraban los demás estados de refrendo y encontraron que Guanajuato ocupa el lugar número 24 en montos.
“Con esta actualización lo que se hizo fue solo llegar a la media nacional. No estamos cobrando más que otros estados. Aún así el cobro sigue siendo más bajo que otros estados”, afirmó.
La salud cuesta mucho
Otro argumento para el aumento de los impuestos estatales en Guanajuato es la necesidad de dinero para brindar buenos servicios.
“Guanajuato tiene el mejor sistema de salud del país, y eso cuesta y cuesta mucho. El Hospital de Alta Especialidad funciona apenas al 30 % y los pacientes se están viniendo para acá. Estamos absorbiendo gastos a los que la Federación no le está entrando. En el tema de lo campesinos, la gobernadora también le entró con un apoyo”, sostuvo.
Recordó que del gasto de operación del Gobierno del Estado, el 93 % se destina a salud, educación y seguridad pública, por los médicos, enfermeras, suministros, policías, patrullas, equipamiento y pago de maestros.
“Guanajuato hace esfuerzos importantes para que los trámites sean más rápidos. Eso cuesta. Hemos hecho inversiones importantes”, afirmó.
Impuesto a bebidas alcohólicas no es al copeo
El martes, AM también publicó que Javier Quiroga, presidente de la Red Estatal de Bares y Cantinas, y el diputado local Víctor Zanella, presidente de la Comisión de Hacienda del Congreso del Estado, afirmaron que se está discutiendo la creación de un impuesto al copeo de bebidas alcohólicas, que se cobraría sobre el total de consumo de los clientes.
Sin embargo, este miércoles, Edmundo Soto aclaró que ni es un impuesto nuevo ni se cobrará al copeo ni mucho menos lo pagarán los clientes de los bares, cantinas, antros o restaurantes.
Precisó que se trata del Impuesto a la Venta Final de Bebidas Alcohólicas en Envase Cerrado, creado en 2022 en la Ley de Hacienda del Estado, este año tiene la misma tasa de 4.5 % que se pretende cobrar en 2026. Ese 4.5 % lo fija la Ley de Coordinación Fiscal.
“No grava el copeo ni el envase abierto porque la Federación no me deja, la Ley de Coordinación Fiscal no me lo permite”, aclaró.
Personas no piden factura
Explicó que funciona así: si una persona va a un supermercado o a una vinatería a comprar una botella de tequila para su consumo individual y no pide factura. Quien paga el impuesto es el supermercado.
Pero si va el dueño de un restaurante a comprar una o una docena de botellas de vino, sí pide factura y después vende ese vino por copas a sus clientes, entonces este restaurantero es quien paga el impuesto.
Esto funciona así porque el impuesto aplica para la venta final de bebidas alcohólicas, como su nombre lo dice. Y por lo tanto, lo paga el cliente final.
Además, destacó que el monto del impuesto que se pagará no es sobre el precio total de la botella, sino que se le quita el IEPS y el IVA y sobre la cantidad sobrante se aplica el 4.5%.
“La persona física no paga este impuesto ni cuando vas al supermercado ni cuando vas al restaurante. No gravamos a la persona física”, aclaró Edmundo Soto.
Impuesto deducible del ISR
Un beneficio que destacó el Subsecretario de Finanzas e Inversión fue que este impuesto a la Venta Final de Bebidas Alcohólicas es deducible 100 % del ISR.
“¿Qué estás logrando con esto? que esa lana se quede aquí en Guanajuato y le disminuyes el dinero a la Federación. Este impuesto no va contra ningún sector”, aseguró.
Pero comentó que en virtud de que se reunieron con los empresarios de este sector, quienes pidieron tiempo, en la Ley de Ingresos se incluyó un artículo transitorio para que entre en vigor hasta julio de 2026.
Por lo tanto, solo se proyecta recaudar 83 millones de pesos el próximo año, cuando en este año se recaudarán 82 millones de pesos. En los siguientes años ya se cobrará el año completo.
Afirmó que además de Guanajuato, otros 17 estados cobran este tipo de impuestos estatales en Guanajuato, cuyo nombre para el siguiente año solo se le quitará a su nombre la palabra “cerrado”.
Impuesto a las plataformas electrónicas
En la Ley de Ingresos del Estado para 2026 otra novedad será el aumento de la tasa de 1 % a 2.5 % del Impuesto Cedular por Actividad Empresarial, pero solo para quienes venden artículos o servicios a través de plataformas digitales.
Explicó que el impuesto también ya existe desde 2005 y solo aplica a personas físicas, no a empresas, que tienen negocios, por ejemplo una tienda de abarrotes.
Pero en virtud de que durante los últimos años han proliferado las plataformas digitales para venta de productos y servicios, el Gobierno Federal empezó a cobrarles y el Gobierno estatal también.
Recordó que este impuesto se cobra a una tasa del 5 % actualmente y así va a seguir para el año próximo. Se calcula y se paga anualmente, al final del año.
Pero el cobro para las plataformas digitales es para que se pague mensualmente sobre los ingresos que se van obteniendo por cada venta. Es decir, para que se hagan cálculos y pagos parciales durante al año.
Se hará así porque de manera anual sería más difícil determinar el ingreso de todo el año por esta vía, porque estos negocios no tienen un local. “Pero es el mismo impuesto”, aclaró Edmundo Soto.
Viajes en Uber
Puso un ejemplo: Un viaje de Uber que cuesta 100 pesos, se le retiene el 2.5 % del impuesto, es decir, 2 pesos con 50 centavos. Esta cantidad la retiene, es decir, la descuenta Uber al chofer que maneja el coche.
Y resulta que durante todo el año, todos los descuentos por los viajes de Uber de una persona ascendieron a 300 pesos.
Pero al mismo tiempo, esta persona hace su cálculo del 5 % para pagar el mismo Impuesto Cedular anual. Durante todo el año tuvo 10 mil pesos de ingresos, 5 mil pesos de gastos y por lo tanto le quedan 5 mil pesos de utilidad. Si a eso se le aplica la tasa del 5 %, son 250 pesos a pagar de impuesto.
Si se saca la diferencia, entre los 300 pesos que ya pagó mes a mes y los 250 pesos que tiene que pagar al año, resulta una diferencia a su favor de 50 pesos que le puede pedir al Sateg que le devuelva.
El Subsecretario de Finanzas destacó que además para pagar este impuesto hay la gran ventaja para el contribuyente que si en un ejemplo como el anterior, ya no quiere hacer declaración y para no complicarse la vida contratando un contador para conciliar la declamación anual con los descuentos mensuales, si el contribuyente quiere que se le tome como pago solo los 300 pesos, el Sateg estará de acuerdo. “Con eso que me pagaste, ahí muere”, sintetizó.
Buscan atajar la evasión fiscal
Daniel Espinoza, subdirector de Ingresos del Sateg (Servicio de Administración Tributaria del Estado de Guanajuato) agregó: “solo es para plataformas electrónicas porque es donde más evasión hay y no dicho por nosotros, sino por la Federación.
“Y porque hay mucha informalidad”, señaló.
Comentó que a la fecha, el Sateg tiene registradas a 5 mil personas físicas que ya están pagando el Impuesto Cedular por plataformas digitales.
Agregó que tienen registradas a cerca de 30 plataformas en su padrón, tanto nacionales como internacionales. “Somos el único estado que tiene este volumen de plataformas”, aseguró.
Pero no quiso decir las marcas porque tienen un contrato de confidencialidad con ellas.
Edmundo Soto destacó que además este impuesto se cobra solo a los contribuyentes asentados o que viven en Guanajuato y solo para ventas en el Estado. Las ventas al exterior por esta vía no se gravan.
Refrendo vehicular subirá 76 % para 2026, si lo aprueban
El Gobierno de Guanajuato ha propuesto un aumento del 76 % en el costo del refrendo de placas vehiculares para el año 2026. Actualmente, los vehículos de motor, remolques y semirremolques pagan 672 pesos, pero a partir del 1 de enero de 2026, la tarifa ascenderá a 1,180 pesos, lo que representa 508 pesos más. Este incremento supera el aumento de 100 pesos aplicado en 2024, que elevó el costo de 572 a los 672 pesos vigentes.
El alza también aplicará a motocicletas, bicimotos y vehículos similares, cuya tarifa actual de 165 pesos subirá a 200 pesos, un incremento de 35 pesos. Esta propuesta forma parte de la iniciativa de Ley de Ingresos del Estado para 2026, la cual fue entregada por la Gobernadora a la Legislatura local y está pendiente de discusión y aprobación en el Congreso en los próximos días.
La justificación oficial para este fuerte aumento se basa en un análisis comparativo nacional. La exposición de motivos de la iniciativa de Ley de Ingresos argumenta que Guanajuato se encuentra entre las entidades con los cobros más bajos por refrendo. El objetivo es igualar la tarifa a la media nacional, que para vehículos es de 1,180 pesos. Este mismo criterio de actualización se aplicó también al costo de la emisión de placas por primera vez.
Según datos de la Secretaría de Finanzas con corte a noviembre, el padrón vehicular del Estado asciende a 2 millones 489 mil 30 unidades entre públicas y privadas. De este total, 1 millón 789 mil 256 son automóviles y vehículos de carga que enfrentarán el aumento de 508 pesos. Adicionalmente, 699 mil 774 propietarios de motocicletas pagarán el incremento de 35 pesos.
El aumento ha generado fuertes críticas, especialmente por parte de la iniciativa privada. Arturo González Palomino, presidente de la Asociación de Distribuidores de Automotores del Estado de Guanajuato (AMDA), afirmó que el Estado está buscando recaudar mil millones de pesos más. Calificó el aumento como un “golpe a los contribuyentes” y una falta de “ingenio o creatividad” por parte de la Secretaría de Finanzas para generar ingresos sin cargar la responsabilidad a las familias.
González Palomino subrayó que este incremento afecta directamente a los “ciudadanos de a pie” que dependen de sus vehículos, especialmente considerando el alto costo y la deficiencia del transporte público en las principales ciudades. El representante criticó que la estrategia financiera del Secretario se limite a aumentar impuestos y recurrir a la deuda, en lugar de generar ingresos a través de estrategias alternativas como la gestión de estacionamientos o carreteras previamente entregadas.
Nuevo impuesto al copeo: Clientes de bares de Guanajuato pagarían 4.5% más
El Estado de Guanajuato implementará a partir del ejercicio fiscal 2026 un nuevo gravamen, calificado como “impuesto al copeo“, que afectará a los establecimientos de bebidas alcohólicas. El cobro será del 4.5 % sobre el costo total de las bebidas alcohólicas servidas en bares, antros y cantinas. Este impuesto, técnicamente denominado Impuesto a la Venta Final de Bebidas Alcohólicas, entrará en vigor el 1 de enero de 2026.
La información fue confirmada tanto por Javier Quiroga López, presidente de la red de bares y cantinas, como por el diputado local Víctor Zanella Huerta, presidente de la Comisión de Hacienda en el Congreso del Estado. Zanella Huerta detalló que esta propuesta se encuentra contenida en la iniciativa de Ley de Ingresos del Estado para 2026, presentada por la Gobernadora Libia Dennise García Muñoz Ledo. Se proyecta que el total de los conceptos de cobros a bebidas alcohólicas recaudará 83 millones 113 mil pesos.
La Secretaría de Finanzas ha justificado la creación de este nuevo gravamen con el argumento de fortalecer los ingresos propios del Estado y mejorar el control sobre los establecimientos. No obstante, la medida ha sido calificada por el gremio de bares y cantinas como un “golpe muy fuerte” a su economía. El presidente Javier Quiroga López advirtió que no podrán trasladar la totalidad del costo a los clientes sin perder competitividad, lo que obligaría a muchos a buscar opciones más baratas.
El sector restaurantero ha manifestado su preocupación, recordando que apenas se están recuperando de los cierres prolongados durante la pandemia. Además del nuevo impuesto, deberán afrontar el incremento del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a los refrescos, un insumo esencial. Adicionalmente, los propietarios de bares y cantinas deberán asumir nuevos costos operativos, incluyendo la contratación de otro contador y la toma de cursos de capacitación ante el SATEG para cumplir con la declaración de este nuevo impuesto.
AM
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