León.- Una joven egresada de La Salle Bajío en 2024 denunció que fue objeto de violencia verbal, emocional y física por parte de su expareja cuando ambos eran estudiantes de la misma universidad.
En conferencia de prensa, Isabella (quien pidió omitir sus apellidos por seguridad) relató que inició una relación con este joven en 2023, pero él empezó a cometer contra ella violencia verbal y emocional. Ella lo dejó y se fue del país a un intercambio. Mientras tanto, él estuvo difamándola.
Cuando regresó, ella pidió que lo cambiaran de salón, pero la Universidad no aceptó, porque no podía quitarle su derecho a la educación, dijeron.
Pero sucedió que el 24 de mayo de 2024, en la fiesta de pregraduación, a la que acudieron ambos, la estuvo acechando hasta que la encontró sola e intentó ahorcarla. Ella se zafó, corrió, pidió ayuda y fue cuando otros compañeros la auxiliaron a ponerse a salvo.
Incumplimiento de órdenes de protección y revictimización
Isabella puso denuncia ante el Ministerio Público, que ordenó a la universidad otorgar medidas de protección a la joven para que no se le acercara el presunto agresor. Pero estas no se cumplieron bajo el argumento de que la agresión ocurrió fuera de la institución y que del intento de ahorcamiento “no había marcas notables”.
Además, la Universidad justificó su inacción porque aunque reconocieron que Isabella no toma, ese día de la fiesta sí lo había hecho, aunque también estaba alcoholizado.
Y el presunto agresor siguió estudiando en el mismo grupo que la joven, que estudiaba Diseño Industrial.
Por lo que Isabella escribió a las autoridades universitarias señalando que no podía estar en el mismo salón que su presunto agresor. Acudió primero con el director de carrera, luego con el vicerrector y al final con el rector, pero no le hicieron caso, según lo dicho por ella en la conferencia de prensa.
La Universidad de La Salle Bajío me revictimizó, por haberme involucrado con él y haber ido a la fiesta. Busqué ayuda en el grupo He for She (en la universidad) pero me informaron que les han bloqueado sus procesos. Le pregunto a la universidad, ¿cuántas agresiones más tienen que pasar?”, expresó la egresada La Salle Bajío.
Amparo logra separación y capacitación obligatoria
Por ello, Isabella presentó una demanda de amparo a principios de este año, por la que se reconocieron los hechos, pero que al inicio careció de perspectiva de género, señaló Paola Fernández Lozano, abogada de la organización Las Libres.
Así que presentaron una revisión de amparo por el incumplimiento de las órdenes de protección y hasta que hubo una resolución del mismo, en julio de este año, entonces la Universidad separó del grupo a Sada Anguiano para que tomara clases virtuales.
La resolución determinó dos medidas obligatorias contra la universidad:
- Tener un plan de capacitación para el personal para atender este tipo de casos.
- Que en el segundo semestre de 2025 y en el primer semestre de 2026 se realice una campaña contra la violencia hacia las mujeres.
En la conferencia, la joven estuvo acompañada por Verónica Cruz, coordinadora de Las Libres, quien cuestionó a la universidad y a la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG), aunque Comunicación Social de la SEG dijo que la universidad no está regida por ella.
La universidad dice que tiene protocolos, pero no los mostró. Este es un caso clarísimo de que no supieron qué hacer porque no tienen al personal capacitado”, afirmó Verónica Cruz.
También señaló a la SEG de no supervisar a la universidad para que no ocurran estos casos.
Compromiso institucional de mejora
AM solicitó a Comunicación Social de la Universidad La Salle su versión sobre este caso, para lo cual envió un comunicado de prensa en el que manifestaron su compromiso para mejorar:
Acatamiento: Implementan acciones que abonan a los efectos emitidos por la autoridad en los plazos señalados.
Mejora de Protocolos: “Expresamos nuestro compromiso para mejorar nuestros protocolos de prevención y atención ante casos de violencia de género o situaciones que puedan vulnerar los Derechos Humanos y la dignidad de quienes integramos nuestra Comunidad.“
Valores: “En esta institución fomentamos ambientes basados en el respeto, la armonía, confianza y todos los valores y principios plasmados en nuestro ideario lasallista.”
Seguridad: “Reafirmamos nuestro compromiso con la dignidad, la seguridad y el respeto de todas las personas, con la finalidad de generar acciones que permitan garantizar una vida libre de violencias para las mujeres de nuestra comunidad.”
La universidad concluyó: “Hemos recorrido un camino de mejora continua con la creación de comités para la atención de violencias en el entorno escolar, así como la promoción de acciones con perspectiva de género”.
AAK
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